El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha tildado este martes de “vergonzosa” la decisión de Reino Unido de suspender 30 licencias de armas a Israel ante el “claro riesgo” de que los equipos sean utilizados para perpetrar “violaciones graves del Derecho Internacional Humanitario” y ha afirmado que el país “ganará la guerra, con o sin armas británicas”.
“Días después de que Hamás ejecutara a seis rehenes israelíes, el Gobierno de Reino Unido suspende 30 licencias de armas a Israel”, ha dicho, antes de afirmar que “esta decisión vergonzosa no cambiará la determinación de Israel a la hora de derrotar a Hamás, una organización terrorista y genocida que asesinó salvajemente a 1.200 personas el 7 de octubre, incluidos catorce ciudadanos británicos”.
Así, ha recalcado que “Hamás retiene aún a más de cien rehenes, incluidos cinco británicos” y ha criticado que “en lugar de ponerse del lado de Israel, una democracia aliada que se defiende ante la barbarie, la decisión equivocada de Reino Unido sólo reforzará a Hamás”.
“Israel está llevando a cabo una guerra justa con medios justos, tomando medidas sin precedentes para mantener a los civiles fuera de peligro y respetando plenamente el Derecho Internacional”, ha argumentado Netanyahu, según un comunicado publicado por su oficina a través de su cuenta en la red social X.
En este sentido, ha reseñado que “al igual que la postura heroica de Reino Unido frente a los nazis es vista a día de hoy como vital en la defensa de la civilización común, la historia juzgará de igual forma la postura de Israel frente a Hamás y el jefe del terror de Irán”. “Con o sin armas británicas, Israel ganará este guerra y asegurará nuestro futuro común”, ha zanjado.
Poco antes, el ministro de Defensa de Reino Unido, John Healey, había sostenido que la suspensión estas licencias “no tendrá un impacto material” sobre la capacidad del país para defenderse e incidió en que Londres sigue siendo “una aliado firme” del país asiático, en medio del conflicto desatado tras los ataques ejecutados el 7 de octubre por Hamás y otras facciones palestinas.
“Seguimos siendo un firme aliado de Israel”, apuntó, al tiempo que abundó en la “absoluta determinación” de Londres a la hora de “estar junto a Israel”. Así, ha reseñado que la decisión deriva del “respeto al Estado de Derecho” y el momento en el que se ha realizado el anuncio. “Estamos en medio de un conflicto sangriento y brutal. Ningún día es un buen día”, destacó.
El ministro de Exteriores británico, David Lammy, arguyó el lunes durante su anuncio que la medida “no es un embargo de armas” como represalia a la ofensiva militar lanzada sobre la Franja de Gaza, al tiempo que sostuvo que en conflictos de este tipo Londres tiene la “obligación legal” de revisar caso por caso las licencias de armas que autoriza Londres.
El Ejército de Israel lanzó una ofensiva contra Gaza tras los citados ataques del 7 de octubre, que se saldaron con unos 1.200 muertos y cerca de 250 secuestrados. La ofensiva deja hasta la fecha cerca de 40.800 palestinos muertos, según las autoridades gazatíes, controladas por Hamás, una cifra a la que se suman más de 660 muertos en Cisjordania y Jerusalén Este a manos de las fuerzas israelíes o colonos.