(Francisco J. Olmo – Europa Press/)
Las infracciones penales de seguridad vial, las lesiones y los hurtos fueron los delitos por los que más personas fueron condenadas en sentencia firme en España durante el 2023. Los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) permiten construir una representación fidedigna de la tan discutida relación entre el fenómeno de la inmigración y la criminalidad, que en los últimos meses se ha colado en la agenda de la política de nuestro país.
Cabe destacar, antes de comenzar el análisis, que el número total de condenados en sentencia firme descendió en 2023 tanto en adultos como en menores. Especialmente positivo es el descenso en los delitos sexuales, de un 10,4 % en mayores de edad y de un 15,4 % en menores respecto al año 2022.
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En cuanto a la nacionalidad de los condenados, el informe del INE destaca que hubo 14,6 condenados extranjeros por cada mil habitantes frente a los 5,8 españoles. Es decir, la tasa de condenados en la población extranjera fue algo superior al doble que en la población con nacionalidad española. Pero, ¿existen diferencias reseñables entre el perfil delictivo de los españoles frente a los extranjeros?
En términos absolutos, los tres delitos que más condenaron a nacionales e inmigrantes en 2023 fueron los mismos: contra la seguridad vial (97.566), lesiones (69.946) y hurtos (60.348). El único cambio en las cifras es que los hurtos fueron el tercer delito más cometido entre los españoles, mientras que en la población extranjera ascendió al segundo puesto. Sin embargo, en términos relativos la situación cambia drásticamente.
Los españoles, condenados por estafas; los extranjeros, por hurtos y robos
Por nacionalidad, el delito que más cometen los españoles -de entre los siete con mayor número de condenas- son las estafas. Del total de 15,727 condenas registradas, un 84,71 % del total corresponden a ciudadanos nacionales frente a un 15,29 de población extranjera. En segundo lugar se encuentran los delitos contra la seguridad vial. Los españoles fueron condenados por el 75,65 % de las 97.566 infracciones con sentencia firme en 2023, frente al 24,35 % de ciudadanos inmigrantes. El tercer delito más penado contra los nacionales fueron las lesiones. Los tribunales dictaron un total de 69.946 sentencias firmes, de las que un 71,6 % condenaron a españoles y un 29,4 a extranjeros.
En cambio, los inmigrantes, a nivel porcentual, cometieron más hurtos, robos y delitos contra la salud pública o de tráfico de drogas. Frente a, por ejemplo, el 24,35 % de las condenas por delitos contra la seguridad vial que acapararon, la cifra aumenta hasta el 34,27 % del total de hurtos (60.348). En segundo lugar, los extranjeros fueron responsables del 33,98 % de los robos condenados frente al 66,02 % de los españoles. Por último, la población inmigrante cometió el 32,65 % de los delitos contra la salud pública frente al 67,35 restante de los nacionales.
Delitos sexuales
El informe del INE también rompe con una tendencia: las condenas por delitos contra la libertad sexual bajaron por primera vez desde el año 2017, cuando el INE comenzó a publicar estos datos. En concreto, descendieron un 10,4 % en los adultos y un 15,4 % en menores. En cuanto a la nacionalidad de los condenados, el 69,21 % son españoles (2.369) y el 30,79 % restante (1.054), ciudadanos extranjeros.
