Martín Valeriano, presidente de la Asociación Nacional de Integración de Transportistas (Anitra), en medio de lágrimas, pedía al Congreso y Ejecutivo medidas más efectivas para luchar contra la ola de extorsiones de las que eran víctimas las empresas de transporte público y que ya habían terminado con la vida de cuatro chóferes. “No queremos más muertes”, esas fueron sus palabras.
Estas declaraciones las dio el pasado 26 de setiembre, cuando se realizó un paro de transportes en la capital, que ocasionó caos y grandes pérdidas económicas. La respuesta del gobierno de Dina Boluarte no se hizo esperar y anunció una declaratoria de emergencia en 14 distritos de Lima y Callao, penas más drásticas contra la extorsión y un proyecto de ley de terrorismo urbano.
Por su parte, el Parlamento también hizo lo suyo y convocó una mesa de trabajo con expertos en materia de seguridad ciudadana y derecho penal. Además, que se presentaron varias iniciativas para endurecer las penas por extorsión y sicariato con cadena perpetua y se agendó un pleno exclusivo para promover leyes que faciliten la lucha contra la criminalidad
Sin embargo, a una semana del estado de emergencia, los medios siguen dando cuenta de hechos delictivos, precisamente en los distritos donde rige esta medida. Además, pese a los pedidos de la ciudadanía y de otros expertos, los congresistas se negaron a debatir la derogación de la ley de crimen organizado.
Es así que, surgió el llamado a una nueva paralización de los transportistas, pero ya no solo en Lima, sino a nivel nacional. Sin embargo, los dirigentes parecen no llegar a un acuerdo sobre si este próximo 10 de octubre se acatará la medida de fuerza.
Posturas a favor
El primero en anunciar una paralización a nivel nacional fue Hermán Mendieta, quien se presentó como presidente de la Asociación de Transportistas Nacional e Internacional. En una entrevista en Canal N, Mendieta indicó que se había llegado a este acuerdo tras una reunión con los otros gremios, porque pese al estado de emergencia se seguían reportando crímenes.
“Nosotros, cuando salimos a trabajar, no sabemos si vamos a regresar. La extorsión y el sicariato se han posicionado de nuestro país al nivel nacional. Anoche, hemos tenido la reunión para aprobar el paro para el 10 de octubre en defensa de la vida y contra el sicariato y las extorsiones”, señaló el último viernes 4 de octubre.
La postura de Mendieta fue secundada por Edgar Vítor, secretario de Transportes Unidos, quien confirmó que se realizaría un paro a nivel nacional.
“Sí (habrá paro el 10 de octubre), se ha concertado ayer y hoy. El paro nacional está aprobado, pero no solo es a nivel Lima sino a nivel nacional. En ningún momento de la reunión, que hemos estado, se ha dicho que no hay paro. Nosotros como agremiación del Perú sí hemos aceptado el paro”, señaló el representante”, declaró a RPP.
Vítor enfatizó en que se trata una decisión de todas las bases, por lo que debe respetarse. “Nosotros queremos ser responsables por la necesidad del pueblo peruano, no solo en transportes, queremos ser respetuosos con las decisiones de las bases, se ha dicho que si hay paro y tenemos que respetar”, agregó.
Vocero en contra
Tras las declaraciones de Hermán Mendieta, Infobae Perú se comunicó con Martín Valeriano quien descartó la paralización del próximo jueves, pues recién se reuniría con los otros representantes. Además, señaló que recién van una semana del estado de emergencia, por lo que aún no se ven los resultados.
Después, en declaraciones a RPP, volvió a desmentir que se haya anunciado un paro, puesto que aún están en conversaciones con el gobierno. “Todavía no hemos anunciado ni un paro. No sé de dónde salen los anuncios de paro, cuando se está conversando con el Ejecutivo y el Legislativo”, declaró.