El abogado Jordi Cabré, del equipo de defensa del expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont, ha afirmado este jueves que el plan que habían ideado para su retorno ha salido “perfecto” y que el objetivo del político catalán no era “hacerse detener ni boicotear ninguna sesión de investidura”.
En una entrevista de ElNacional.cat recogida por Europa Press, ha dicho que la finalidad del expresidente era “ejercer su derecho como diputado electo” en el Parlament y ha añadido que aún lo mantiene.
Al preguntársele por el paradero de Puigdemont, ha respondido que lo desconoce y que no sabe si se dará a conocer en las próximas horas, pero ha celebrado que hasta el momento el resultado de lo planeado “ha sido perfecto”.
“Hemos sufrido mucho hasta cinco minutos antes de que llegara el presidente. Por tanto, puedo decir que la montaña escalada durante la mañana ha sido fuerte”, ha explicado Cabré.
Y sobre la no delegación de voto de Puigdemont y por la ausencia del lazo de amarillo en su escaño –que sí está en el del diputado de Junts Lluís Puig–, ha dicho que “todo tiene un sentido”, pero ha evitado dar más explicaciones.