El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, ha trasladado al embajador de Argentina en Madrid, Roberto Bosch, la exigencia de una “rectificación pública” por parte del presidente de su país, Javier Milei, tras sus declaraciones sobre la mujer del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Fuentes diplomáticas han indicado a Europa Press que Albares ha traslado a Bosch, quien ha estado menos de media hora en el Ministerio, “la exigencia de una rectificación pública” ante las palabras de Milei durante el acto organizado el domingo por Vox.
El encuentro “se ha producido dentro los cauces del respeto y la cortesía diplomática que tanto el Gobierno como el ministro mantienen en todo momento”, han precisado las fuentes, que no han querido aclarar en qué términos se ha pronunciado el embajador, quien ha abandonado Exteriores sin realizar declaraciones.
Según ha podido constatar Europa Press, Bosch, quien precisamente entregó sus cartas credenciales a Felipe VI el jueves pasado en el Palacio Real, ha llegado en torno a las 13.25 horas a la sede del Ministerio en la plaza del Marqués de Salamanca y ha abandonado el edificio hacia las 13.50.
Albares había adelantado en diversas entrevistas esta mañana que había convocado a Bosch, tras haber llamado a consultas la víspera a la embajadora española en Buenos Aires, para exigir “disculpas públicas” por lo que el Gobierno considera que fue un ataque por parte de Milei contra las instituciones españolas, después de que este tildara de “corrupta” a Begoña Gómez, la mujer de Sánchez.
Asimismo, el ministro ha indicado que de no producirse esa disculpa, el Gobierno podría emprender medidas adicionales. “Nosotros esperamos que se produzcan esas rectificaciones públicas”, ha comentado el ministro en La Sexta antes de reunirse con el embajador argentino.
En dicha entrevista, había emplazado a “esperar a ver cómo evolucionan los acontecimientos” y había indicado que el Gobierno irá “adoptando las medidas que consideremos oportunas” sobre la base de “dos parámetros”, la defensa de “la dignidad de nuestras instituciones”, “nuestra democracia” y nuestra soberanía” y “no tomar ninguna medida que pueda afectar a esos lazos literalmente fraternales de dos pueblos hermanos”.