Saudi Aramco, la mayor petrolera del mundo, registró un beneficio neto atribuible de 55.871 millones de dólares (51.031 millones de euros) en el primer semestre del año, lo que supone una reducción del 7,4% respecto del mismo periodo del ejercicio precedente, según se desprende del informe de resultados publicado este martes.
La cifra de negocio de la petrolera entre enero y junio se mantuvo estable en 242.256 millones de dólares (221.268 millones de euros), mientras que los gastos operativos aumentaron un 5,6%, hasta 133.322 millones de dólares (121.772 millones de euros).
Entre abril y junio, la compañía obtuvo un beneficio neto atribuido de 28.309 millones de dólares (25.856 millones de euros), un 2,5% inferior al contabilizado un año antes, mientras que los ingresos sumaron 125.497 millones de dólares (114.625 millones de euros), un 5% más.
“Hemos logrado un rendimiento líder en el mercado, con sólidas ganancias y flujos de efectivo en la primera mitad del año”, declaró Amin H. Nasser, presidente y consejero delegado de Aramco, quien destacó la “respuesta positiva” de los inversores a la oferta pública secundaria de acciones de Aramco por parte del Gobierno saudí y su reciente emisión de bonos por 6.000 millones de dólares (5.480 millones de euros).
“A partir de estas fortalezas, también logramos un progreso significativo en áreas estratégicas clave durante el segundo trimestre, desde el avance de nuestro programa de gas y la expansión de nuestra nueva cartera de energías, hasta la asociación con los principales fabricantes de automóviles en tecnologías de vehículos con menores emisiones y el crecimiento de nuestra red minorista global”, añadió.
Asimismo, el ejecutivo subrayó que “aprovechando estas sólidas ganancias”, la compañía sigue entregando un dividendo base sostenible y progresivo, así como un dividendo vinculado al rendimiento que comparte el beneficio con los accionistas.
De este modo, en consonancia con su objetivo de maximizar el valor para los accionistas, el consejo de Aramco ha declarado un dividendo base de 20.300 millones de dólares (18.541 millones de euros) y una nueva distribución de dividendos vinculados al desempeño de 10.800 millones de dólares (9.864 millones de euros), lo que eleva el total de dividendos declarados para el segundo trimestre a 31.072 millones de dólares (28.380 millones de euros), en línea con el trimestre anterior.
En este sentido, la petrolera espera que se declaren dividendos totales de 124.200 millones de dólares (113.440 millones de euros) en 2024.