En las últimas horas, la lideresa Marián Rodríguez Camelo fue asesinada en una zona rural de Mapiripán, Meta, de acuerdo con información obtenida por la emisora colombiana W Radio.
Hombres armados llegaron a su hogar, matándola a ella y a otro campesino. Marián era presidenta de la Junta de Acción Comunal de la vereda Unibrisas y fundadora de la organización de mujeres “Nosotras para Nosotras”. La OEA, que reconoció su trabajo, condenó el asesinato y pidió una rápida investigación.
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Fuentes locales atribuyen el ataque y el asesinato de la líder social Marián Rodríguez Camelo al Frente 39 de las disidencias de ‘Iván Mordisco’, grupo que controla la zona. La Policía del Guaviare confirmó que los cuerpos fueron trasladados a Mapiripán y luego a Puerto Gaitán.
(Europa Press/Contacto/Sebastian /)
El coronel Alexander Obando expresó solidaridad con las familias y afirmó que se están realizando investigaciones en coordinación con las autoridades judiciales para identificar a los responsables.
Marián Rodríguez era una figura clave en la comunidad, conocida por su compromiso con el bienestar social. Su asesinato ha generado un llamado urgente para que se tomen medidas más efectivas para proteger a los líderes sociales en Colombia.
La organización que fundó, “Nosotras para Nosotras”, sigue siendo un símbolo de su dedicación a mejorar la vida de las mujeres en su comunidad. La OEA recordó que Marián había trabajado estrechamente con ellos en varias ocasiones, destacando su influencia y la importancia de su labor.
Colombia es el cuarto país con la tasa de homicidios más alta de América Latina en 2023
En 2023, según cifras entregadas por el Ministerio de Defensa, en Colombia se registraron un total de 13.432 personas asesinadas, lo que ubica al país cafetero en el cuarto lugar con la tasa de asesinatos más alta en América Latina, solo por debajo de Ecuador, Honduras y Venezuela.
Así lo determinó el informe publicado por la fundación InSight Crime, que se encarga de investigar y analizar el crimen organizado en Latinoamérica y el Caribe, y que recopiló datos sobre asesinatos en los países de la región.
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Según el balance de InSight Crime sobre los homicidios en 2023, “al menos 117.492 personas fueron asesinadas en América Latina y el Caribe durante 2023, lo que arrojó una tasa de homicidios de 20 por cada 100.000 habitantes”.
Uno de los problemas que encontró la fundación al momento de realizar el estudio fue que los datos de algunos países son “inexistentes o poco fiables”, lo que abre la posibilidad de que la cifra total de personas asesinadas sea mucho mayor.
De acuerdo con el documento, los 13.432 homicidios que reportaron el Ministerio de Defensa y la Policía Nacional “arrojaron una tasa de homicidios de 25,7″, lo que representó un ligero descenso de la cifra reportada en 2022, que fue de 26,1.
Entre los departamentos que más registraron crímenes se encuentran Putumayo, con una tasa de 60,6, y Cauca, con 53,3. Pero, InSight Crime alertó sobre lo sucedido en el archipiélago de San Andrés y Providencia, puesto que registró una tasa de 65,8, lo que lo posicionó como la región del país con la cifra más alta, lejos de la tasa de 2022 en la que llegó a 45,1.
Lo anterior se explicaría, de acuerdo con el informe, por la presencia de organizaciones delictivas dedicadas al narcotráfico y a que en los últimos años la isla se ha convertido en una de las rutas importantes para el tráfico de migrantes.
“Las autoridades locales atribuyen los homicidios principalmente a venganzas entre clanes familiares”, sostuvo el informe.
Otro de los puntos críticos en el territorio colombiano que registra una tasa importante de asesinatos es la frontera con Ecuador, en el Putumayo, pues los enfrentamientos de las disidencias de las Farc se han convertido en “uno de los principales motores de violencia”.
En Cauca, el Estado Mayor Central (EMC) “ha atacado a las fuerzas del Estado y a civiles para mantener el control sobre las economías ilícitas de la región”.
La fundación también destacó que las principales economías criminales que se desarrollan en el país están relacionadas con la trata de personas y a exportación de cocaína, mientras que como organizaciones criminales destacó la presencia del Ejército Nacional de Liberación (ELN) y a las Autodefensas Gaitanistas de Colombia, también conocidas como el Clan del Golfo.
