El ministro de Derechos Sociales, Pablo Bustinduy, ha criticado que la foto del líder de Vox, Santiago Abascal, con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, muestra el “apoyo explícito” al “genocidio” en Gaza de la “derecha y extrema derecha”.
También ha censurado que de esta instantánea también queda “retratado” el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, con su “silencio cómplice” sobre la reunión entre Abascal y Netanyahu.
En estos términos se ha expresado el ministro, en declaraciones a los medios al asistir al acto ‘Cuidados con derechos’, para asegurar que esa foto “perseguirá a Abascal” durante toda su vida, pues ha mantenido un encuentro con el primer ministro hebreo a pocos días de que el Tribunal Penal Internacional haya emitido una orden de arrestro contra Netanyahu por crímenes de guerra para “darle su apoyo”.
“Si algo hay que elogiar de la ultraderecha española es que no disimulan y dejan bien claro a la vista de la ciudadanía cuál es la alternativa que están defendiendo esa alianza, esa coalición de la derecha y la ultraderecha, con un apoyo explícito a el genocidio en Palestina con 36.000 asesinados”, ha ahondado Bustinduy.
Posteriormente, ha reprendido los ataques del ministro de Exteriores de Israel contra la líder de Sumar, Yolanda Díaz y ha desgranado que, a su juicio, no es más que una “operación para intentar desviar el foco” de la situación en Gaza “lanzando la mayor provocación posible, la más agresiva, la más burda posible”. “Lo único que intenta es generar una polémica artificial”, ha considerado.
Respecto a las críticas del PP al presidente, Pedro Sánchez, por la causa abierta tras la denuncia de Manos Limpias contra su mujer, el ministro ha acusado a “la derecha y la ultraderecha” de hacer una “campaña electoral centrada exclusivamente en un acoso y derribo”, “sin conocer ni respetar límite alguno”, al Gobierno.
“Intentan enturbiar y hacer irrespirable la atmósfera y la conversación pública. Lo hacen porque no tienen nada de lo que hablar, no tienen un proyecto de país ni de Europa, porque no quieren un debate de ideas”, ha concluido.