Los técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha) calculan que 4,8 millones de pensionistas que cotizaron hasta finales de 1978 reducirán sus ingresos en el IRPF por la parte de sus pensiones de jubilación o invalidez que derivan de aportaciones a mutualidades que no pudieron deducir con la normativa tributaria vigente en su día.
Gestha incide que también los herederos de los mutualistas fallecidos entre 2019 y 2023 pueden pedir la reducción, presentando además el modelo H100-solicitud de pagos de devolución a herederos, junto con la documentación que se señala en el mismo.
Según explican los técnicos de Gestha en un comunicado, “la Disposición Transitoria 2ª de la Ley del IRPF (DT2) solo se aplica a las pensiones de trabajadores hasta el 31/12/1978 sobre la parte de las aportaciones de mutualidades que no pudieron deducirlas antes de la primera Ley 40/1978 del IRPF, que entró en vigor en 1979″.
Los autónomos no se benefician
Por tanto, no se benefician las pensiones de autónomos porque todos pudieron deducir las aportaciones a sus mutualidades para el cálculo del rendimiento de su actividad; así como tampoco las pensiones de clases pasivas de funcionarios cuyas cotizaciones también dedujeron.
Esto es, en ningún caso, ninguna aportación a mutualidades fue deducible antes de 1978, por lo que se reduce al 25% la parte de las pensiones correspondiente a las aportaciones a mutualidades creadas con la Ley 1941 (entidades sustitutorias de la Seguridad Social), salvo que se acredite la parte que exceda de lo que se repercutió en nómina y no pudo deducirse -se adjunta abajo el anexo-, y reduce al 100% la parte de las pensiones correspondiente a Mutualidades laborales que se inscribían en la Dirección de Trabajo antes de 1967 (entidades gestoras de la Seguridad Social), y al 25% desde ese año.
Final de la campaña
Gestha también garantiza que la actual campaña de renta discurrirá sin sobresaltos, pues los técnicos de Hacienda “están coordinando los equipos de atención telefónica y la atención presencial en las oficinas de la Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT)”, señalan en un comunicado.
Por ello, proponen que se mejoren las condiciones de trabajo de los técnicos especialistas de la Administración Digital Integral (ADI) para que su personal prefiera permanecer en este exigente servicio y evitar la fuga del talento.
El comunicado incide en que la información y asistencia especializada requiere de un reconocimiento y valoración que ahora mismo no tienen para que este servicio sea un pilar clave en el fortalecimiento del cumplimiento voluntario de la obligaciones tributarias, como se plantea en todos los planes estratégicos plurianuales de la AEAT.
En concreto, los trabajadores de la Administración Digital Integral resuelven, a través de chat en horario de 9 a 19 horas, las dudas sobre el IRPF y la mayoría de los impuestos y procedimientos. También dan respuesta fundamentada a las consultas de los grandes despachos de la asesoría nacional e internacional. Además de ofrecer información tributaria por escrito a cuestiones complejas sobre determinados impuestos, a través del servicio ‘Informa+’, explica el comunicado.