No ha dejado indiferente a nadie que la ha podido ver ya, e incluso se asegura que algunos espectadores tuvieron que abandonar la sala del mal cuerpo que estaba dejando. The Substance ha entrado entre lo mejor del Festival de Cannes y se ha situado como una de las grandes contendientes a la Palma de Oro, junto a otras como Bird de Andrea Arnold o Anora de Sean Baker. La película de Coralie Fargeat (Revenge), que ha sido comparada con la anterior ganadora de Cannes Titane o con las películas más explícitas de David Cronenberg, también ha dejado algo tocadas a sus protagonistas: Margaret Qualley y especialmente Demi Moore.
Tal y como ha desvelado la actriz de películas como Ghost. Más allá del amor o Algunos hombres buenos, durante el rodaje de The Substance ha vivido uno de sus grandes retos como actriz a sus 61 años, especialmente por el nivel de vulnerabilidad al que estaba expuesta. “El nivel de vulnerabilidad y crudeza que se necesitaba para contar la historia estaba muy claro. Y fue una experiencia muy vulnerable que requería mucha sensibilidad y mucha conversación sobre lo que intentábamos conseguir”, explicaba Moore en una entrevista. Para ello, la actriz también desvela que fue indispensable la intervención de su compañera de reparto, Margaret Qualley, para hacerla sentirse más cómoda dentro de lo inusual de la situación.
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“Tenía a alguien que era una gran compañero con la que me sentía muy segura. Obviamente estábamos muy unidas -desnudas- y también nos divertíamos mucho en esos momentos por lo absurdas que eran ciertas situaciones. Pero, en definitiva, se trata de dirigir realmente la comunicación y la confianza mutua”. Junto a las dos actrices está también Dennis Quaid en un papel que originalmente era para Ray Liotta antes de que el actor de Uno de los nuestros falleciese, y al que el propio Quaid dedicaba la película. “Fue durante esta semana hace dos años que falleció, así que quería acordarme de él. Era un actor increíble”.
Una de las películas del festival
En la película Moore interpreta a una estrella en decadencia que se interesa por una droga del mercado negro, The Substance, un artefacto de replicación celular que supuestamente puede crear una versión más joven de sí misma. Esta nueva criatura, interpretada por Qualley, debe pasar su tiempo junto a ella, y en una escena en la que es “parida”, el personaje de Moore se detiene a estudiar el cuerpo de ambas antes de decidirse a apretar el gatillo del artefacto y unirlas irremediablemente, en una secuencia tan cruda como necesaria para el desarrollo del filme con el desnudo integral de ambas incluido.
A la espera de que concluya el certamen celebrado en la Riviera francesa, The Substance es sin duda una de las películas que más huella han dejado, y varios aseguran que es la que se ha llevado la ovación más larga, aunque ya se sabe que eso nunca es garantía de nada. La audacia de la directora Coralie Fargeat al plantear una historia tan fantástica pero con tanta simbología con respecto a la actualidad y el papel de las mujeres en ella ha sido sin duda motivo de elogio por parte de los críticos. Habrá que esperar a su llegada a salas españolas, pero ya es uno de los títulos marcados en mayúsculas que han salido del festival.
