El sábado 25 de mayo, dos mascotas de Vicente López protagonizaron una historia repleta de ternura. Sirius, un labrador negro, y Avacyn, un caniche toy, se escaparon de su hogar en La Lucila y fueron encontrados de una manera muy especial.
Todo comenzó con un mensaje desesperado en un grupo de WhatsApp del gimnasio. David, dueño de los perros, compartió un flyer pidiendo ayuda: “Anoche se salieron dos de mis perros cuando fui a recibir un pedido de comida y no me di cuenta. ¿Me ayudan a difundir?”, explicaba en el mensaje, acompañado de una foto de Sirius y Avacyn. Los perros se habían perdido la noche del sábado, y su familia estaba angustiada por no saber de su paradero.
El alivio para la familia de David llegó al día siguiente de la huida de sus mascotas, luego de una intensa búsqueda y la difusión de un cartel con un pedido de recompensa. Pola, uno de los compañeros de CrossFit del dueño de los perros, tuvo la clave para resolver el misterio de lo que había sucedido con los animales durante la noche.
“David, fue donde vivo. Anoche hasta las 3 AM estuvimos viendo de dónde eran. Durmieron en el gimnasio del edificio. No sabes lo protector que era el negrito del caniche. Me alegro que eran tuyos y aparecieron”, respondió su compañero al flyer, aportando una cuota de tranquilidad y alegría a la familia.
“Los busqué toda la noche pero no los encontré. Qué bueno que los guardaron. Y Sirius es todo un amor”, respondió el dueño emocionado.
Además, al mensaje de tranquilidad, le sumó una foto donde se veía a los animales completamente asustados en la noche del sábado. “Aparecieron así solitos en la puerta”.
Finalmente, Sirius y Avacyn volvieron sanos y salvos a su hogar, gracias a la solidaridad y rápida acción de sus vecinos y amigos que le prestaron un lugar para pasar bajo techo una de las noches más frías del año. Lo curioso es que jamás se separaron.