Bruselas, 8 sep (EFECOM).- El ex primer ministro italiano Mario Draghi presentará este lunes un informe con recomendaciones para impulsar la competitividad europea en el que abogará por un “cambio radical” para hacer frente a potencias como Estados Unidos o China en la escena global.
Lo hará en una rueda de prensa junto a la renovada presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, quien le encargó elaborar el informe durante la pasada legislatura y tendrá en su mano incorporar las fórmulas que proponga el italiano en las políticas que implemente en este segundo mandato.
El también expresidente del Banco Central Europeo (BCE) ya presentó el pasado miércoles a los embajadores de los 27 Estados miembros y a los jefes de todos los grupos de la Eurocámara las líneas principales de un documento que se estructurará, según fuentes diplomáticas, en cinco capítulos: productividad, reducción de dependencias, clima, inclusión social y recomendaciones específicas para los diez principales sectores de la economía europea.
Draghi destacó que en las últimas décadas la competitividad europea ha sido víctima de una serie de “frenos estructurales” que la UE debe abordar, entre los que subrayó la falta de capacidad de innovación, los precios más altos de la energía, brechas en habilidades – sobre todo tecnológicas – y la necesidad de acelerar la digitalización, así como de impulsar con urgencia las capacidades en defensa.
El desarrollo del mercado de capitales, las normas de ayudas de Estado, la política de cohesión o el aumento de la inversión son otras de las prioridades contempladas por el economista, quien también hizo referencia a las relaciones con Estados Unidos y China.
Ante los colegisladores, Draghi advirtió de que hará falta implicar al sector privado, una cooperación sin precedentes entre Estados miembros y reformas institucionales para poner en marcha sus recomendaciones, según fuentes con conocimiento de la discusión.
“Está haciendo sonar la alarma”, resumió tras el encuentro parlamentario el presidente de los Verdes, Bas Eikchout, quien explicó que Draghi criticó la “complacencia” de una UE que no es totalmente consciente de los problemas que afronta de cara al futuro y urgió a cambiar.
“Necesitamos una UE preparada para el mundo de hoy y de mañana. Así que lo que propondré en el informe (…) es un cambio radical”, avanzó el exmandatario en abril en un discurso en el que advirtió de que la rivalidad internacional ha aumentado y otras potencias no juegan ya con las mismas reglas que Europa.
Países como Estados Unidos y China, dijo, están adoptando políticas para reforzar su competitividad que, en el mejor de los casos, están diseñadas para redirigir inversión hacia sus propias economías a expensas de la europea y, en el peor, para hacer a los europeos permanentemente dependientes de ellas.
Frente a ello, la UE se encuentra sin una estrategia que le permita mantener el ritmo en la carrera por el liderazgo tecnológico, proteger sus industrias tradicionales o garantizarse suministros esenciales, constreñida en su respuesta por una organización y financiación diseñadas para “el mundo de ayer”, en palabras de Draghi.
Por ello, abogó por acometer una “transformación de la economía” basada en tres vectores: aprovechar el tamaño de un mercado único con 450 millones de consumidores, invertir conjuntamente en bienes públicos europeos -como interconexiones energéticas o supercomputadoras- y asegurar la disponibilidad de suministros críticos y personal formado.
Estas ideas serán las que previsiblemente vertebrarán un informe que se sumará al publicado en abril por el también ex primer ministro italiano Enrico Letta, centrado, precisamente, en explotar el potencial del mercado europeo para evitar que la UE siga perdiendo terreno. EFECOM
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