El Departamento de Justicia de Estados Unidos ha anunciado este miércoles un “golpe decisivo” contra la pandilla supremacista blanca Peckerwoods al imputar a un total de 68 de sus miembros de decenas de delitos, en particular de tráfico de drogas, en una operación a gran escala en la ciudad estadounidense de Los Ángeles, en el estado de California, en el marco de una investigación de terrorismo interno.
El fiscal general estadounidense, Merrick Garland, ha indicado que este grupo es “una violenta pandilla de supremacistas blancos a la que acusarán de ser responsable de traficar fentanilo letal y otras drogas, cometer robos y perpetrar fraudes financieros para financiar tanto su empresa criminal como (la pandilla carcelaria) Hermandad Aria”, según reza un comunicado.
“Con los cargos y arrestos de hoy, el Departamento de Justicia, junto con nuestros socios estatales, locales y federales, ha apuntado al corazón de las operaciones de esta pandilla, y continuaremos concentrándonos en las empresas criminales que ponen en peligro a nuestras comunidades”, ha asegurado.
Las autoridades han arrestado durante la jornada a 42 miembros de Peckerwoods, mientras que también han confiscado “grandes cantidades de armas de fuego ilegales y grandes cantidades de fentanilo, metanfetamina y heroína, según la acusación. Si son declarados culpables, los acusados se enfrentan a una pena máxima de cadena perpetua.
“La ideología violenta de supremacía blanca de los Peckerwoods y su amplia actividad criminal representan una grave amenaza para nuestra comunidad. (…) Son una fuerza destructiva. Al procesar a los miembros de la organización criminal Peckerwoods, nuestra oficina está cumpliendo con su misión de proteger al público de las amenazas más peligrosas”, ha sostenido el fiscal federal para le distrito central de California Martin Estrada.
Esta pandilla, cuyos miembros “usan tatuajes e iconografía nazi para demostrar su ideología extremista de supremacía blanca violenta”, utiliza las redes sociales para compartir sus actividades y reglas, para identificar a los miembros con buena reputación y para localizar a aquellos que infringían las normas del grupo. En ocasiones reciben órdenes de la Hermandad Aria y mantienen una alianza con la Mafia Mexicana que controla las pandillas latinas de California.
