El Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) ha fallado este jueves que un comerciante tiene que avisar claramente de la obligación de pago antes de realizar un pedido y aceptar las condiciones de un servicio.
La sentencia se refiere a un cliente en Alemania que antes de pulsar en el botón de pedido, marcó una casilla para aceptar las condiciones generales, por las cuales debía pagar una retribución equivalente a un tercio de la renta anual ahorrada si prosperaban las tentativas del prestador de servicios para reclamar a sus arrendadores la renta pagada en exceso.
El TJUE considera que, de acuerdo a la Directiva europea,el profesional debe informar al consumidor antes de realizar el pedido en Internet de las obligaciones de pago a las que queda sujeto.
Esto debe aplicarse “con independencia de si la obligación de pago es incondicional o se ejecuta después del cumplimiento posterior de una condición”, recalca la sentencia.
En este sentido, el TJUE establece que si el comerciante no ha respetado su obligación de información, el consumidor “no estará vinculado por el pedido” pero que nada le impide confirmarlo.