El presidente Javier Milei recibió el llamado de José Raúl Mulino, quien ganó las elecciones presidenciales en Panamá en mayo y comenzó su gestión en las últimas horas. En la conversación telefónica que difundió el propio Mulino este martes 2 de julio, hubo sintonía entre ambos mandatarios y quedó abierta la posibilidad de un encuentro para avanzar en una agenda en común.
“Empezando a trabajar en el primer día con mucho ímpetu, siguiendo su ejemplo”, fue el primer elogio del flamante presidente de Panamá. Por su parte, Milei devolvió gentilezas: “Qué gusto enorme tener la posibilidad de felicitarlo y desearle lo mejor en los desafíos que tiene que enfrentar”, se escuchó a través del altavoz del teléfono del panameño, en la charla que luego fue compartida a través de las redes sociales.
En igual sentido, Mulino remarcó el valor de la comunicación entre los presidentes: “Le agradezco muchísimo la llamada de Argentina porque para nosotros es muy importante, sobre todo en el vuelco que usted le ha dado a la política argentina, que tiene mucho en común con el vuelco que yo tengo que dar aquí para parar la corrupción y frenar la fiesta que nos endeudó en 50 mil millones de dólares”, reconoció el mandatario panameño.
A su vez, agregó: “Evidentemente, tengo que hacer una limpieza muy profunda y créame que he seguido mucho su discurso. Yo no tengo la capacidad de pasar una ley como la que usted pasó, pero me hubiera encantado”, remarcó tras la reciente aprobación de la Ley Bases.
“Si usted le dice a la gente lo que recibió y hace el ajuste, la gente acompaña. Eso es lo que yo le podría comentar desde mi experiencia. Es decir, yo le hablé a la gente con la verdad desde el primer día y dije que iba doler lo que iba a hacer, pero es el camino”, aseguró Javier Milei.
Por su parte, Mulino dio una nueva señal concordia hacia el jefe de Estado argentino: “Yo lo hice ayer en mi discurso, para que desde el primer día esté claro que lo que va a pasar aquí es un ajuste grande y no estoy mintiendo. Tengo que hacerlo para sobrevivir y no perder el grado de inversión que para nosotros es muy importante”, puntualizó el presidente de Panamá.
Asimismo, el mandatario argentino argumentó: “Es que si no lo hace, la propia realidad se lo va a llevar puesto. Es un falso dilema, porque si no ajusta termina mal y la única chance que uno tiene para que funcione bien es haciendo el ajuste y esperar que la economía reaccione rápido”.
“Si logra que lo acompañen con inversiones es menos doloroso el efecto del ajuste. Póngale garra que le va a salir. Si lo hace con convicción, los va a convencer. Así que le deseo lo mejor”, añadió Javier Milei en la conversación telefónica de este martes.
Antes de finalizar el diálogo, Mulino afirmó que nombrará próximamente a un embajador en Argentina “de primer nivel”. “Ojalá lo tenga pronto por Panamá”, concluyó.
“Voy a considerar hacer una escala por Panamá y visitarlo. La mejor de las suertes y un gran abrazo”, cerró el presidente argentino. Luego, Mulino le agradeció en sus redes sociales: “Vamos a fortalecer las buenas relaciones y la hermandad de nuestras naciones”.
Quién es Mulino
José Raúl Mulino, el delfín y persona de confianza del ex mandatario Ricardo Martinelli. Ganó la elección presidencial en Panamá en mayo con más del 95% del escrutinio preliminar y el reconocimiento por parte de la autoridad electoral y de sus rivales de su victoria.
Mulino, ex ministro de Seguridad de Martinelli de 64 años que reemplazó en la boleta al popular ex mandatario por los partidos Realizando Metas y Alianza, obtuvo el 34,38% de los votos, mientras que Ricardo Lombana, del Movimiento Otro Camino, quedó segundo en el conteo preliminar con un 24,92% del conteo.
La jornada electoral destacó por la histórica participación de votantes, con más del 77,57% de los panameños.
“Misión cumplida carajo”, proclamó Mulino ante sus seguidores tras la victoria. “Aquí estamos porque hemos llegado con el voto mayoritario del pueblo panameño duele a quien le duela”, defendió, aún recordando que no imaginaba este resultado cuando le ofrecieron presentarse como vicepresidente con Martinelli.