El juez que investiga a Begoña Gómez por tráfico de influencias y corrupción en los negocios tomará declaración este lunes en calidad de investigados al empresario Juan Carlos Barrabés y al rector de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), Joaquín Goyache.
Precisamente, ha trascendido que Barrabés ha recurrido su imputación ante el juez, y por tanto su citación, alegando que “de lo actuado no se deduce razón alguna para prestar declaración como investigado o dirigir la investigación” en su contra.
En su declaración como testigo, que se celebró el pasado 15 de julio, el empresario aseguró haber mantenido varias reuniones en el Palacio de La Moncloa con Begoña Gómez, y que en dos de ellas estuvo presente Sánchez, según explicaron en declaraciones a los medios varias de las acusaciones populares –Vox, Iustitia Europa, Hazte Oír y Manos Limpias– que asistieron al interrogatorio.
Sin embargo, otras fuentes jurídicas también presentes en su declaración matizaron a esta agencia de noticias que Barrabés había hablado de cuatro o cinco reuniones en La Moncloa con Begoña Gómez para tratar sobre el máster que impartía, pero que con el presidente sólo estuvo en una ocasión con motivo de una reunión con directivos del sector de la innovación y sin estar presente la esposa de Sánchez.
En la denuncia que provocó la apertura de la causa, Manos Limpias acusaba a Begoña Gómez de haber actuado “prevaliéndose de su estatus personal” como esposa del presidente del Gobierno. “Ha venido recomendando o avalando por carta de recomendación con su firma a empresarios que se presentaban a licitaciones públicas”, decía.
Según el sindicato, uno de esos empresario “beneficiados” por las “recomendaciones o avales” de Begoña Gómez era Barrabés, a cuyas empresas se le habrían adjudicado licitaciones públicas por valor de 10 millones de euros.
GOYACHE Y LA REUNIÓN EN MOCLOA
Al igual que Barrabés, Goyache en su declaración como testigo del pasado 5 de julio confirmó, según fuentes consultadas por Europa Press, que mantuvo una reunión con Gómez también en La Moncloa y que la misma se produjo antes de que arrancara la cátedra que dirigía Gómez en la UCM. También señaló al magistrado que para impartir ese máster no era necesario que la esposa del presidente fuera licenciada dado que con sus años de experiencia era suficiente.
Precisamente esta semana, el rector ha enviado una carta a la comunidad universitaria señalando que desconoce cuáles son los hechos que son objeto de investigación en la causa que se sigue contra Begoña Gómez ni qué conducta delictiva se le atribuye.
“En cualquier caso, de nuevo responderé a toda cuestión que se me plantee, porque sé que al final quedará demostrado que, como rector, he actuado siempre con total sometimiento a la ley y al Derecho”, explicaba en ese correo enviado.
El mismo lunes, el juez prevé tomar declaración en calidad de testigos a otras tres personas: al consejero delegado (CEO) de Barrabés, Luis Miguel Ciprés; al director general de la Fundación Deporte Joven del Consejo Superior de Deportes (CSD), Félix Jordán de Urries; y al presidente del Instituto de Empresa (IE), Diego del Alcázar Silvela.
EL MARTES, A LA MONCLOA
El magistrado se desplazará el martes al Palacio de La Moncloa donde prevé tomar declaración testifical al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Pese al intento de Sánchez de que tuviera lugar por escrito dado su cargo, el juez Carlos del Valle –en sustitución de Juan Carlos Peinado–finalmente decidió el pasado viernes mantener la presencialidad del mismo y que la declaración tenga lugar en las dependencias de La Moncloa.
En su carta, el presidente del Gobierno indicaba al juez que tiene voluntad de “colaborar” con la Justicia, pero defendía que su declaración como testigo debía ser por escrito dado que su comparecencia “resulta inescindible” de su cargo. “Es mi deber preservar el sentido propio de la institución”, añadía.
Sánchez incidía en que la Ley de Enjuiciamiento Criminal diferencia entre la declaración de un presidente por hechos de los que tenga conocimiento por “razón de su cargo” o por hechos ajenos a su ejercicio como presidente. En el primer caso, la norma da la posibilidad de declarar por escrito; en el segundo, no.
En este sentido, insistía en que para “garantizar el estricto cumplimiento del ordenamiento jurídico” y dadas las cuestiones que se investigan en la causa que dirige el Juzgado de Instrucción Número 41 de Madrid la declaración “debe producirse conforme a lo establecido en el artículo 412.2 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal (LeCrim)”.
En cualquier caso, Pedro Sánchez se convertirá en el tercer presidente que ha sido citado a declarar como testigo ante un juez durante su mandato, aunque en su caso se le ha llamado en la fase de investigación de una causa que se sigue por presunto tráfico de influencias contra su esposa, Begoña Gómez.
Antes, su predecesor, Mariano Rajoy declaró como testigo en el juicio de la primera etapa del ‘caso Gürtel’ (1999-2005) que afectaba a la financiación irregular del PP, mientras que Felipe González compareció en 1991 en la fase de investigación del ‘caso Marey’.