Una de las jugadas trascendentales del duelo entre Cruzeiro y Boca Juniors en los octavos de final de la Copa Sudamericana se dio a los 30 segundos de juego, cuando Luis Advíncula se fue expulsado tras darle una patada al tobillo de Lucas Romero. El mediocampista argentino que juega en el conjunto brasileño habló acerca de la infracción que derivó en la tarjeta roja al defensor peruano.
“Fue una jugada totalmente accidental. Es más, creo que yo le llego desde un punto medio ciego para él porque venía disputando la pelota con Lautaro Díaz, se le va un poco larga y le aparezco de un costado para picársela justo”, dijo Romero en declaraciones al programa ESPN F3.
El árbitro colombiano Wilmar Roldán le mostró la tarjeta roja a Advíncula, ya que el peruano impactó con los tapones de su botín derecho sobre la pierna del adversario, haciéndole correr un serio riesgo al físico del rival. “Creo que es una jugada que al comienzo del partido él (por Advíncula) podría haber evitado ir tan agresivo a esa disputa por el hecho que recién comenzaba el partido. Era una jugada de mitad de cancha que no generaba mucho peligro si recuperábamos la pelota”, continuó el futbolista de 30 años surgido de Vélez.
“No la veo con mala intención. Sí que fue una falta agresiva y que claramente era para expulsión porque la regla dice que si el pisotón es encima del pie, o sea del tobillo para arriba es roja directa y si es en el pie es amarilla. También se ve que fue fuerte la falta”, señaló Romero.
* Lucas Romero contó qué le dijo Chiquito Romero en la cancha
El mediocampista que también tuvo un paso por Independiente en el fútbol argentino contó los entretelones de su cruce con Chiquito Romero luego de la jugada que derivó en la expulsión.
“Me habló de buena manera. Hablé con Marcos (Rojo) para tratar de dejar el partido calmado. Nosotros desde un comienzo queríamos que el juego fluya, que no esté parado. Sí traté de hacerles entender a los jugadores de Boca que no estaba actuando, que había sido falta y que era para expulsión. En la jugada Chiquito vino a tranquilizarme y yo le dije que quería jugar al fútbol, nada más. El partido de ida estuvo muy hablado, hubo mucha disputa y lo que nos servía a nosotros era que el partido fuese más fluido”, expresó el Perro.
Por último, Romero se refirió al arbitraje de Roldán: “Wilmar manejó bien el partido. Durante el segundo tiempo por ahí hubo algunas faltas contra el 10 nuestro (Matheus Pereira) que no le cobraron. En la ida sí, siento que fueron más rigurosos con nosotros con el tema de las tarjetas amarillas, tanto que el primer tiempo terminamos con bastantes jugadores amonestados y eso perjudicó un poco nuestro partido”.
Cruzeiro jugará en cuartos de final de la Copa Sudamericana frente a Libertad de Paraguay, que superó en los penales a Sportivo Ameliano. El resto de los cruces son: Racing-Athletico Paranaense, Fortaleza-Corinthians y Lanús-Independiente de Medellín.