El secretario de Culto de la Nación, Francisco Sánchez, ratificó hoy su posición en contra de leyes emblemáticas de la Argentina, y aseguró que buscará implementar un proceso para revertir la interrupción legal del embarazo, aprobada por el Congreso en 2020. Además, aseguró que los hijos de parejas divorciadas sufren de ansiedad y rinden menos respecto de los de familias consolidadas.
Sánchez había tenido definiciones polémicas el último fin de semana durante su exposición en el encuentro conservador “Europa Viva”, cuando hizo una amplia crítica de las leyes de divorcio, matrimonio igualitario y aborto legal en Argentina, entre otras.
Hoy, rechazó las críticas que recibió por ese posicionamiento, ratificó su posición y anticipó que impulsará la reversión de la ley del aborto legal. “Creo que es un tema que no se trata solamente de la presentación de una iniciativa legislativa sino que se trata de un proceso. Hay que encarar un camino en Argentina para que el aborto se termine. Vemos las consecuencias”, aseguró.
En ese sentido, durante una entrevista con el periodista Eduardo Feinmann en Radio Mitre, recordó las críticas que recibió durante la década de los ‘80 la ley de divorcio, impulsada y aprobada durante el Gobierno de Raúl Alfonsín, y aseguró que hay “estudios serios” que indican que “cerca del 30% de los chicos que son hijos de familias separadas sufren trastornos de ansiedad, y los hijos de familias separadas tienen rendimientos (escolares) 25% inferior respecto de hijos de familias consolidadas”.
“Eso fue destacado en su momento, y muchos se reían, y hoy lo vemos como una realidad. Lo mismo pasa con el aborto. Hoy Argentina tiene un invierno demográfico. Increíblemente Argentina hoy tiene tasas de natalidad similares a las que tiene Corea del Sur y España, dos de los países que han empezado a despoblarse trágicamente. Argentina necesita repoblarse, con lo cual, no solo tenemos que pensar en derogar el aborto, sino también tenemos que pensar en medidas que promuevan la natalidad para que la cuestión demográfica vuelva a ser un eje del desarrollo del país”, añadió.
Sánchez recordó además que cuando se aprobó la ley de aborto legal él era diputado, y fue el primer legislador que presentó un proyecto para derogarla. Y si bien también ratificó su rechazo al matrimonio igualitario, a la educación sexual en las escuelas y al divorcio, dijo que no está en la agenda iniciativa respecto de esas leyes porque “son temas que la sociedad argentina hoy no está preparada para debatir”.
El sábado, el secretario de Culto se presentó en Madrid como uno de los oradores de “Europa Viva”, la cumbre conservadora en la que el presidente Javier Milei fue uno de los principales expositores el domingo. Allí, Sánchez resaltó los valores conservadores y cuestionó con dureza las leyes que, considera, “atentan contra los valores tradicionales”.
“Se aprobaron leyes para que la ideología de género sea obligatoria en las escuelas, para pervertir a nuestros hijos, para hacer daño a nuestra sociedad, y los conservadores seguimos aferrándonos a lo poco que nos dejaron”, fue una de las frases del funcionario.
“Son todas leyes controversiales y que hoy parece que no se pudiera uno ni siquiera expresar respecto de esos temas. A tal punto hemos llegado que quien se expresa respecto de esos temas trata de ser cancelado y es atacado, como lo he vivido yo en estos días. A mí en lo personal no me afecta, pero sí es grave para una sociedad que necesita del diálogo, de escucharse, y sobre todo que debe respetar la libertad de conciencia y de opinión”, reflexionó hoy Sánchez.
Cercano a Patricia Bullrich, con muy buen vínculo con la vicepresidenta Victoria Villarruel, Sánchez fue elegido por Javier Milei para estar al frente de la Secretaría de Culto, envuelto en una fuerte polémica, principalmente, por haber pedido la pena de muerte para Cristina Kirchner y por haber criticado duramenta al papa Francisco.
El exdiputado neuquino había cuestionado a Francisco el año pasado por la designación del ex juez de la Corte Suprema Eugenio Zaffaroni en la Junta Académica Fundadora del Instituto para la investigación y promoción de los Derechos Sociales “Fray Bartolomé de las Casas”, en el ámbito de la Pontificia Academia de las Ciencias Sociales.
“Caso para estudiosos encontrar un Papa que haya hecho tanto daño”, dijo en aquel momento Sánchez, quien luego pidió disculpas públicas.
“Sin dudas que me arrepiento de lo que señalé en relación al Santo Padre. Seguramente por la cuestión política, cruzada por la grieta que ha dominado la escena política en los últimos años, la designación de Zaffaroni fue interpretada por mí, y por otros, como algo negativo para la política argentina sin comprender, en mi caso, las implicancias que en realidad tiene cada acción del Santo Padre y el Vaticano. Parte de la ignorancia, las pasiones y cierta imprudencia me llevaron a cometer ese error. Me arrepiento y pido perdón”, le dijo a Infobae este año, cuando su designación aún no había sido oficializada.
En octubre del año pasado, Sánchez también tuiteó contra el islamismo. “Hoy se cumplen 452 años, en que las fuerzas católicas vencieron a los otomanos en la batalla de Lepanto. Buen día para recordar la gesta que salvó a la cristiandad y a Occidente todo de las hordas islámicas. Espero que el mundo encuentre rápidamente la paz”, escribió en sus redes sociales.
Su designación como secretario de Culto también generó inquietud y desaprobación en parte de la comunidad judía argentina. En las redes sociales circula un video con una entrevista al ex legislador, quien, en diálogo con una joven libertaria que se hace llamar Delfina Wagner, avala una teoría conspirativa sobre la colectividad judía: señala a George Soros y a los Rockefeller como ejemplos de los poderosos que forman parte del “sionismo internacional” que dominan el mundo. “Hay gente muy poderosa, tomando decisiones sobre la soberanía de los Estados y los derechos individuales”, remata el ex diputado.