Los rumores sobre la inminente llegada de Adrian Newey a Aston Martin no paran de reforzarse. El ingeniero británico tienen contrato con Red Bull todavía, sin embargo, el equipo austriaco confirmó en mayo de 2024 que se marcharía “al comienzo de 2025″.
No obstante, parece que su salida se ha acelerado. Después de que se especulara con su llegada a Ferrari, todo apunta a que la escudería en la que pilota Fernando Alonso será su nueva casa. Lawrence Stroll, director del equipo y padre de Lance Stroll, habló sobre este tema en la cadena norteamericana Bloomberg TV.
El periodista le preguntó si los aficionados podían esperar que se sumara a Aston Martin y Newey afirmó que “definitivamente” lo podían asumir. Tras incluir un túnel de viento y un simular propio, el paso definitivo para la escudería británica es contar con un diseñador innovador. Actualmente, cuenta con diez Mundiales de Constructores.
Actualmente, en Red Bull cobraría unos 10 millones de libras por año, tal y como se acordó en 2020, casi el doble de lo que percibió por año en McLaren entre 1997 y 2005. Sin embargo, el posible acuerdo con Aston Martin le reportaría mayores beneficios. Todavía no hay nada confirmado, pero llegaría antes del Gran Premio de Bakú, Azerbaiyán, y tendría contrato por cuatro temporadas con un sueldo de 20 millones de libras.
Un fichaje a fuego lento
La próxima gran cita del automovilismo se celebrará entre el 13 y el 15 de septiembre. Lawrence Stroll confirmó: “Adrian y yo no solo hemos estado hablando durante meses, sino que hemos hablado durante años. Es la persona con más talento de la Fórmula 1. (…) Me encantaría que se uniera al equipo, ya que creo que todos los demás equipos de F1 en la parrilla sentirían exactamente lo mismo”.
Además, con el estreno de las nuevas instalaciones y la exclusividad de motores Honda, a partir de 2026, el proyecto que ofrece la escudería británica es tentador. Actualmente, Aston Martin no atraviesa su mejor momento, pero la llegada de Newey puede suponer un punto de inflexión.
Su trabajo no se limita solo a la ingeniería, sino también al diseño y a la innovación. Un ejemplo de ello es el Aston Martin Valkyrie, un coche de superalta gama. El vehículo fue una colaboración entre Red Bull y la propia Aston Martin y solo se fabricaron 150 unidades para la carretera.
El túnel de viento comenzará a estar disponible a partir de comienzos de 2025. Sin embargo, no podrá meter mano en el vehículo que pilotará Fernando Alonso la temporada que viene. “Se trata más bien de lo que tenemos ahora y de lo que estamos produciendo. Entender qué va en la dirección correcta, qué va en la dirección equivocada y tratar de prepararnos para 2025 de una mejor manera”, finalizó.
En caso de confirmarse el fichaje, el técnico tendrá influencia en el monoplaza para 2026. Precisamente ese año comienza el cambio de reglamento de la FIA, en el que se acortará el tamaño de los coches (de 3,6 metros a 3,4), se reducirá el peso (de 798 kg a 768 kg), se estrechará el alerón delantero y el suelo, o desaparecerá el DRS, entre otras modificaciones.