Este miércoles se vivió un tenso momento al aire de Mañanisima el ciclo que conduce Carmen Barbieri por la pantalla de El Trece. El dirigente del Polo Obrero Eduardo Belliboni, quien ya había participado en ocasiones anteriores en el ciclo, analizaba desde un móvil la previa del paro general impulsado por la CGT para el jueves 9. Mientras hablaba de la movilización prevista y de la situación del país, se produjo un cruce con Ricardo Canaletti, periodista especializado en policiales y panelista del ciclo.
Todo se disparó cuando pidieron la intervención de Canaletti como abogado, para que expusiera sobre la constitucionalidad o no del corte calles para protestar. “Me hace mal, para mí es un virus, a mí me hace mal al corazón, me da pericarditis este señor, no quiero hablar”, lanzó el periodista aludiendo a Belliboni, Desde entonces, se produjo un fuerte intercambio con el dirigente gremial que fue creciendo en intensidad, con exabruptos incluidos y la participación eventual de las panelistas Majo Martino y Estefi Berardi, que solo concluyó con la mediación de la conductora.
Así fue el cruce entre Ricardo Canaletti y Eduardo Belliboni
Belliboni: —Me da mucha lástima que alguien le rehuya al debate, diciendo que le doy pericarditis, yo no le doy pericarditis a nadie.
Canaletti: —El debate con usted no.
Belliboni: —Si quiere discutir que discuta y si no quiere discutir, no ofenda. No todas las opiniones son consideradas, la tuya no es considerada, ¿entendió? Señor Canaletti, si no quiere discutir, no ofenda. Entonces, córrase, vaya al baño, vaya a la cocina, ahí cocine con el compañero (Alberto) Martín.
Canaletti: —Yo también lo puedo mandar a muchos lugares, que seguramente usted ya conoce.
Belliboni: —A mí no me venga a ofender, si no quiere no intervenga. No diga pavadas, señor.
Canaletti: —Tomátelas, ¿siempre lo mismo esto? Saquen del aire a un tipo que…
Belliboni: —No digas pavadas, votante de Milei, votante de Milei oculto, que diga que votó a Milei, que quiere que este gobierno siga atacando trabajadores, diga eso señor Canaletti, listo y ya está. Pericarditis nada, pericarditis tuve yo, no digas pavadas.
Canaletti: —Usted es un virus, un virus para la sociedad.
Belliboni: —Y usted es una bacteria, que es mucho peor.
Canaletti: —Usted no tiene con qué discutir, usted es un maleducado, usted es un tipo que repite siempre lo mismo, usted es un tipo que debería poner sobre la mesa de qué vive, una y mil veces.
Belliboni: —Pero lo digo en todos los programas, ya puse mi currículum en la mesa 20 mil veces.
Canaletti: —No, no, no. Hablamos los dos a la vez. ¿Sabe qué? Váyase al carajo.
Belliboni: —Señor, entonces hable usted. Yo, por respeto a Carmen, no lo voy a interrumpir.
Canaletti: —Entonces, escúchelo con toda amplitud, váyase al carajo.
Barbieri: —Bueno, Ricardo, por favor.
Canaletti: —Pero por qué ponen a un tipo de este, que no contribuye a la sociedad, ni al progreso, ni a los trabajadores, a nada. Este tipo vive en el siglo XIX.
Martino: —Y deje de alimentarse de los pobres.
Canaletti: —Y déjese de joder.
Belliboni: —Tenemos un panel un poquito agresivo.
Barbieri: —Yo quiero escucharlo a él porque es el secretario del Polo Obrero.
Canaletti: —No es nada, es un junta pulgas, que vive de los pobres.
Berardi: —No es nadie.
Canaletti: —Andá a laburar ahora, ¿qué mierda estás haciendo ahí? Andá a laburar ahora, como estamos laburando nosotros. Es un virus, una bacteria, bicho, alimaña. Todo esto sos.
Belliboni: —Carmen, una sugerencia, llamen al SAME porque se va a descomponer.
Canaletti: —Sáquenlo del aire, de una vez por todas.
Barbieri: —No lo voy a sacar del aire. Lo invité y quiero escucharlo. No quiero que maltrates a un invitado.
Canaletti: —Entonces la culpa es mía… Podemos hacer tranquilamente un debate sin la necesidad de que esté ese tipo ahí. Ese tipo no aporta nada, jode al país, a la gente, y viene con un discurso de víbora para enroscarte.
Barbieri: —Basta, quiero escuchar a Eduardo.
Belliboni: —Gracias, Carmen, le agradezco su respeto.
Canaletti: —Yo no le tengo ningún respeto.
Belliboni: —No voy a contestar los improperios porque es un horario en el que hay chicos. Yo trabajo desde los 18 años….
Canaletti: —¡Justamente, hay chicos, no podés estar en pantalla vos!
Barbieri: —Por favor, Ricardo.
Belliboni: —¿No necesita un médico ese señor?
Barbieri: —Por favor, no quiero que sigan discutiendo. Los dos piensan totalmente distinto y está claro.