Desde 2021 el Ministerio de Salud del Perú (Minsa) ha realizado diversas campañas con el objetivo de sensibilizar a la población respecto a los riesgos de la automedicación porque, paradójicamente, en vez de ayudar a mejorar la salud puede ser la causa de su empeoramiento.
El uso de medicamentos sin receta médica puede originar desde intoxicación hasta dependencia e incluso la muerte. Por eso es importante conocer los peligros de la automedicación así como promover, entre los peruanos, un cuidado responsable de la salud.
Una muestra de los riesgos de la automedicación es lo que está ocurriendo en el Hospital Emergencias Grau de EsSalud (Seguro Social de Salud del Perú), en el que 6 de cada 10 pacientes llegan a los consultorios con males agravados por el uso de medicamentos sin que estos hayan sido prescritos por un médico.
Al respecto, uno de los peligros más grandes es que la automedicación puede provocar un shock anafiláctico o anafilaxia, que consiste en una reacción alérgica potencialmente mortal.
La automedicación
La automedicación es definida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como la selección y el uso de medicamentos por las personas para tratar enfermedades o síntomas autoreconocidos. Esta práctica se realiza sin la supervisión de un profesional médico en la indicación, dosificación, duración del tratamiento, ni en la explicación de las precauciones y advertencias a considerar.
En esencia, automedicarse implica tomar o aplicarse medicamentos, hierbas o remedios caseros por propia iniciativa o por consejo de otra persona, sin consultar a un profesional de la salud que diagnostique la enfermedad, extienda la prescripción médica, también conocida como receta médica, y supervise el tratamiento.
La receta médica es una nota escrita por un médico, que indica el medicamento que debe administrarse a un paciente, así como las pautas para su correcta administración.
La automedicación en nuestro país ha aumentado considerablemente debido a la facilidad de acudir a una farmacia o botica y consultar de manera negligente por soluciones a problemas de salud sin recurrir a un médico profesional.
“Ingerir medicamentos sin una guía médica es un problema de salud pública pues lleva a complicaciones y riesgos que pueden entorpecer un diagnóstico y tratamiento oportuno de las enfermedades, llevándolo a reacciones adversas e intoxicaciones”, señala el doctor Gino Felandro Taco, médico internista de EsSalud.
Por eso es importante que, ante cualquier dolencia, se acuda al establecimiento de salud más cercano para prevenir y detectar a tiempo la enfermedad o condición que está originando dicha dolencia.
¿Qué es un shock anafiláctico?
En el caso del Hospital de Emergencias Grau de EsSalud, los pacientes que se automedican suelen llegar con síntomas como urticaria, insuficiencia respiratoria, dolores abdominales y hasta peligrosos shocks anafilácticos.
Además, la automedicación puede enmascarar una apendicitis, causar molestias gastrointestinales y provocar reacciones alérgicas como ronchas, congestión nasal, rinitis, urticaria o insuficiencias respiratorias e incluso desarrollar resistencias a los antibióticos.
Los antibióticos son medicamentos utilizados para prevenir y tratar infecciones bacterianas. La resistencia a los antibióticos ocurre cuando las bacterias mutan en respuesta al uso de estos fármacos sin la supervisión de un profesional de la salud que diagnostique adecuadamente la enfermedad del paciente.
Pero, sin duda alguna, lo más peligroso de la automedicación es el shock anafiláctico, que es “una reacción alérgica grave del sistema inmunitario a un químico o sustancia al que se ha estado expuesto. Puede evidenciarse picazón en la piel, edemas, colapso de los vasos sanguíneos, desmayos, dificultad para respirar y, en el peor de los casos, provocar la muerte”, tal como advierte Felandro.
Los síntomas del shock anafiláctico habitualmente se manifiestan minutos después de la exposición a un alérgeno. Sin embargo, en ocasiones pueden aparecer media hora más tarde o incluso después. En casos aislados, puede retrasarse varias horas. Los signos y síntomas incluyen los siguientes:
- Reacciones cutáneas, incluidas urticaria, picazón y piel pálida o enrojecida
- Presión arterial baja (hipotensión)
- Constricción de las vías respiratorias e inflamación de la lengua o garganta, lo que puede causar sibilancia o dificultad para respirar
- Pulso débil y rápido
- Náusea, vómitos o diarrea
- Mareos o desmayos