Lejos de ser basura, fierros oxidados que deberían salir por chatarra, las piezas de las luminarias reemplazadas en la red del alumbrado de la ciudad valían dinero, mucho dinero.
Esos elementos de alumbrado público que hoy se supone están desaparecidos o fueron robados en Bucaramanga, tienen un costo financiero para el municipio. Es decir, son parte del patrimonio de los bumangueses.
Aún siendo ‘trastos oxidados’, de haberlo sido todos, entre los arrumes de aquellos supuestos inservibles había elementos valiosos de posible reutilización quizá, pero el solo peso de los ‘desechos’ metálicos vendidos por kilos, generaría buenos dividendos.
La Comisión de Regulación de Energía y Gas, CREG, define cada una de estas piezas como Unidades Constructivas de Alumbrado Público, Ucaps.
La misma CREG precisa que los costos de los Ucaps “serán calculados por los municipios y/o distritos, conforme a requisitos y precios del mercado”.
Los expertos calculan que la totalidad del material del que no se conoce paradero, tendría un costo que oscila entre $1.200 y $1.500 millones.
Y de esa ‘valía’ tenían certeza quienes estuvieron cerca de la ejecución de las licitaciones, montajes y recuperación de las partes reemplazadas en cada gobierno.
Y así como lo sabían los responsables de las refacciones nuevas y viejas, lo sabían otros ciudadanos con disposición para denunciar cualquier extravío, como de forma evidente lo denunciaron Emiro Arias Bueno y Édgar Mauricio Díaz Millán.
La denuncia penal por presunto robo de chatarra
Tal sería su certeza, que se atrevieron a instaurar una denuncia penal contra Jaime Andrés Beltrán Martínez, actual alcalde de Bucaramanga; Jorge Alejandro García, Secretario Municipal de Infraestructura, como ordenador del gasto; Juan Carlos Gélvez Rojas, con labores de Coordinador de Alumbrado Público de Bucaramanga, (dice la denuncia que así lo reconocen algunos en el palacio municipal).
Incluso, en la denuncia hacen alusión a Edgardo Rodríguez Herrera y Émerson Jair Brilla Lache, por la pérdida de los elementos almacenados en las bodegas de Alumbrado Público.
La Unidad Investigativa de Vanguardia conoció que los denunciantes precisaron el lugar donde se cometió el llamado “robo de la chatarra” (denominación a las luminarias de sodio, luminarias de halógeno, postes metálicos y otras piezas).
Según el documento, fueron sustraídas de varias bodegas al servicio del Alumbrado Público, ubicadas en: carrera 30 con calle 67, esquina. conocida como la Bodega La Hormiga y otras fueron ‘desaparecidas’ de las instalaciones del Colegio Villas de San Ignacio, en el norte de la ciudad, conocido como ‘Paso Malo’.
¿Cuándo comenzó el presunto robo de chatarra?
El presunto robo comenzó el 15 de febrero de 2024, es decir, hace 8 meses. Y de eso se tiene la anterior evidencia fotográfica.
Las ambigüedades en las respuestas de quienes se presumían responsables de los objetos, llevaron a sospechar lo que ahora es motivo de este proceso.
Cuando les solicitaron información “incurrieron en imprecisiones de tiempo, modo o lugar en sus respuestas”.
En esas indagaciones salió a relucir, además, el nombre de Óscar Ramírez, de quien se dice en los documentos, sería hermano de la esposa del Alcalde de Bucaramanga.
Los denunciantes instauraron el proceso por los presuntos punibles de peculado por apropiación (Art. 397 del C.P. y falsedad material en documento público Art. 287 de la ley 599 del 2000, así como por concierto para delinquir, Art. 340 C.P.
La Unidad Investigativa de Vanguardia estableció que los denunciantes, en busca de conocer en detalle la operación de aquellos depósitos y la manera como se desarrollan los procesos de almacenamiento y disposición de elementos desinstalados del mobiliario de la ciudad -como activos de la infraestructura- solicitaron a la Fiscalía que sean llamados a dar declaraciones los últimos cuatro ex directores o coordinadores de Alumbrado, (a saber: John Larrota, Róbinson Castro, Mayra Salcedo y Nicolás Cobos).
Estas personas -afirman- conocieron al detalle el manejo, almacenamiento y cantidades de elementos entregados en su momento, desde la responsabilidad de su cargo.
Y son los indicados para que proporcionen toda la información verbal o documental que poseían al momento de entregar sus puestos.
En el relato de los hechos se precisa que la Alcaldía de Bucaramanga, para 2018 firmó los contratos 341, 346, 343 y 347 para realizar el cambio de 24.000 luminarias de sodio a LED.
Un año después, 2019, se firmaron los contratos 356, 357, 358 y 359, para realizar el cambio de 8.000 luminarias de sodio a LED. “Es decir, de estos contratos se dio de baja y fueron llevadas a las bodegas de alumbrado público nada más que 32.000 luminarias”.
De manera adicional, en 2019 se modernizaron parques y vías donde se cambiaron postes y luminarias existentes, “debiendo ser reintegrados estos elementos a las bodegas de alumbrado público”.
Contratos que fueron dejando rastro
Pero había más. Contrato 275/2019 modernización de AP calle 30 entre carreras 26 y 27; contrato 251/2019 modernización de AP calle 34 y 37 entre carreras 10 a 12; contrato 285/2019 modernización AP Calle de los Estudiantes; contrato 192/2019 modernización AP del parque Los Canelos; contrato 297/2019 modernización del AP perimetral del parque la Flora; contrato 245/2019 modernización del AP del Parque Morrorrico; contrato 294/2019 modernización de diferentes parques.
A esta larga lista sumaron más contratos, durante los años 2020, 2021, 2022 y 2023, más los otros inservibles que había desde el año 2016.
Todo eso, más lo de 2018 y 2019, debía sumar en bodegas de alumbrado público cerca de 32.526 luminarias y 330 postes metálicos, así como elementos de obras de infraestructura que retiraron desde 2015 al 2023. Toda una chatarrería.
El proceso que avanza en la Fiscalía
La Unidad Investigativa de Vanguardia consultó a la Fiscalía General, Seccional Santander, sobre el tema. Precisó que el proceso fue asignado el 16 de agosto de 2024 y su estado es activo.
Aclaró que no tiene “asignación especial” y avanza en la Unidad Seccional para la Administración Pública, en Bucaramanga.
El silencio de los presuntos responsables es absoluto. Vanguardia le envió un mensaje, vía Telegram, a Óscar Ramírez, desde el 19 de octubre en la mañana, para buscar su opinión sobre el tema y el proceso en Fiscalía, pero nunca respondió.
Lo mismo sucedió con el asesor de Alumbrado Público, Edgardo Rodríguez Herrera, a quien le hicimos dos solicitudes de comunicación, el viernes 18 de octubre y tampoco hubo respuesta.
Contraloría audita lo que sucedió con la “chatarra”
La Contraloría Municipal, bajo la dirección de Viviana Marcela Blanco Morales, anunció y presentó, con fecha 19 de junio de 2024, una comunicación al Alcalde Jaime Andrés Beltrán.
En ella le anuncia la “Actuación Especial de Fiscalización (AEF-015-2024) a la Oficina de Alumbrado Público del Municipio de Bucaramanga”.
En la comunicación se afirma que esa actuación se hará en desarrollo del Plan de Vigilancia y Control Fiscal Territorial.
Se aclara, además, que lo actuado terminaría el 23 de agosto de 2024, con la “emisión del informe final de auditoría”.
El objetivo de este procedimiento, según la misma Contraloría, es “verificar la presunta evidencia de pérdida de material reciclable de elementos que han sido cambiados en el alumbrado público de Bucaramanga”.
El organismo de control fiscal informa que, para la realización del trabajo de campo se designó como líder del equipo auditor, a Germán Pérez Amado, jefe de la Oficina de Vigilancia y control Fiscal.
Pérez Amado, administrador financiero y de sistemas, cumplirá el rol de supervisor, y trabajará en compañía del abogado José Luis Calderón Durán, Auditor Fiscal quien cumplirá el rol de líder de auditoría.
En diálogo con la Unidad Investigativa de Vanguardia, Pérez Amado dijo que el proceso que adelanta es una “auditoría, que avanza en este momento y el informe definitivo se entregará el próximo 22 de noviembre”, como último plazo.
Ante la pregunta de si se investiga presunta pérdida o robo de “chatarra de alumbrado”, Pérez aclaró que esas piezas no pueden calificarse como chatarra. Tanto él, como Calderón Durán dijeron que en realidad es un “proceso transversal, que audita no solo luminarias, sino demás elementos de alumbrado público” de la ciudad.
Óscar Ramírez y el alumbrado público
Este ciudadano, Óscar Ramírez, se presume que sería el directo implicado en las acciones que habrían conducido al supuesto robo o desaparición de los elementos de alumbrado público, sacados de forma clandestina de las bodegas de la ciudad.
En poder de la Unidad Investigativa de Vanguardia hay más de 500 fotos, más de 20 audios, decenas de chats de WhatsApp, cerca de 20 videos y demás elementos reveladores y que se anexaron como pruebas a la Fiscalía.
En algunos de los audios se escucha a una persona, mientras imparte indicaciones logísticas para la salida de los elementos de esas bodegas.
Los denunciantes le aseguraron a la Fiscalía que la voz corresponde supuestamente al ciudadano identificado como Óscar Ramírez. La persona que aparece en el audio habla con uno de los hombres de confianza dentro de la Oficina de Alumbrado del Municipio.
El mismo ciudadano, y así también se consignó en la denuncia ante la Fiscalía, aparece en múltiples eventos y publicaciones al lado del Alcalde de Bucaramanga y otros funcionarios.
Existen otros audios en lo que supuestamente el mismo personaje sostiene conversaciones con esos altos funcionarios y chats reveladores de las presuntas irregularidades en Alumbrado Público. Todo está en poder de la Unidad Investigativa de Vanguardia y de los órganos de control y de investigación penal.
En el Chat “Seguridad Alumbrado BGA”, reposan registros de vigilantes de las bodegas de donde se robaron presuntamente o se desaparecieron los elementos de alumbrado público, que fueron entregados como evidencia a la Fiscalía General, Seccional Santander.
Uso para los residuos de alumbrado público
El Reglamento Técnico de Iluminación y Alumbrado Público, Retilap, establece directrices específicas para manejar materiales considerados chatarra, pero que aún tienen vida útil.
Según el Retilap, estos materiales deben ser gestionados de manera que se maximice su reutilización y reciclaje, minimizando el impacto ambiental. En particular, la Resolución 40150 de 2024 incluye disposiciones sobre la gestión de residuos de equipos de iluminación.
La norma especifica que los materiales que aún tienen vida útil deben ser evaluados para su posible reutilización en otros proyectos de iluminación o ser reciclados de forma adecuada.
El Retilap promueve la implementación de programas de economía circular, donde los materiales desechados se reintegran al ciclo productivo, reduciendo generación de residuos.
$1.200
a $1.500 millones podría costar el material o la chatarra de alumbrado público, de la cual no se conoce paradero.
La respuesta de la Alcaldía
La Unidad Investigativa de Vanguardia dialogó con Rodrigo Parada, abogado del alcalde Jaime Andrés Beltrán. El profesional dijo que las respuestas sobre esos temas le correspondían directamente a la Administración Municipal y solicitó que habláramos con el también abogado Cristian Portilla, quien es el secretario privado del Mandatario bumangués.
El viernes, Portilla dijo que el Alcalde estaba fuera de la ciudad, pero que le enviáramos las preguntas por escrito y Beltrán Martínez las respondería.
El sábado en la mañana, vía WhatsApp, el secretario privado envío el documento que se transcribe tal y como lo remitió, en respuesta a nuestras inquietudes, sin firma alguna y atribuyéndoselo a “Prensa y Comunicaciones Alcaldía de Bucaramanga”:
“La premisa fundamental en el gabinete de gobierno conformado por el alcalde Jaime Andrés Beltrán, es el respeto a la ciudadanía y especialmente a las instituciones. Los ciudadanos pueden tener la confianza que el primer mandatario no va a intervenir en ningún tipo de actuación de carácter administrativo judicial, independientemente de la persona que pueda verse afectada por la misma.
“Hecha esta aclaración, hay que dar claridad a la ciudadanía que en que en estos momentos existen diversas autoridades que se encuentran investigando las denuncias que otras personas han radicado. Denuncias que valoramos, porque nos permiten analizar a detalle cualquier situación o presunto error que se cometa.
“De igual forma, se están investigando las denuncias que, desde la alcaldía de Bucaramanga, se hicieron tan pronto asumió la nueva administración y al momento del empalme con la anterior, en donde uno de los aspectos que se puso presente era el relacionado con la inexistencia de una entrega de un inventario por parte de la Secretaría de Infraestructura.
“Desde el primer momento se puso de presente a las distintas autoridades, que no había existido una entrega formal y que se presentó una pérdida de comunicación con el entonces secretario de Infraestructura, en lo que tenía que ver, entre otras cosas, con el inventario de alumbrado público.
“No solamente desde la oficina de Control Interno de Gestión, sino desde la misma Secretaría de Infraestructura, se informó a distintos entes de control para que tomaran las medidas correspondientes. Esto no obedeció a ningún tipo de denuncia de ningún tercero, sino a la gestión misma que se ha efectuado desde la Alcaldía de Bucaramanga.
“Basado en esto, la ausencia de un inventario, desde un primer momento, generó múltiples inconvenientes. Hay que destacar, que varias personas que hoy son interesados en esta cuestión, hicieron parte de la Alcaldía de Bucaramanga en la administración saliente y fueron los que omitieron hacer la presentación del respectivo inventario.
“No existe ninguna posibilidad de considerar que haya habido ningún tipo de hurto, que se ha querido mencionar. Según información brindada a la administración, el equipo de vigilancia que tiene a cargo la custodia de estos elementos, dejó unas claras anotaciones respecto al material que no se permitía trasladar, e inhabilitaba el ingreso o salida de personal sin que existiera un registro. En ese sentido se da un parte de tranquilidad a la ciudadanía. Las mismas autoridades puedan corroborar quiénes, cómo y cuándo ingresaron a los distintos lugares donde se encuentran los bienes del municipio.
“No existe ninguna pérdida de bienes a cargo del municipio, como se ha querido mencionar. Esto es falso.
“Lo que pueden estar seguros los ciudadanos es que desde el municipio se ha venido saneando las irregularidades que se advirtieron, en la entrega del respectivo empalme. Como se ha manifestado, se puso en conocimiento a las distintas autoridades esta situación humana, y será el entonces secretario de Infraestructura el llamado responder por esta situación.
“La alcaldía de Bucaramanga, en cabeza de Jaime Andrés Beltrán tiene como premisa la transparencia y el cuidado de los recursos públicos”.
La entrada Este es el escándalo que salpica a la Alcaldía de Bucaramanga por la pérdida de 32 mil luminarias se publicó primero en Q’hubo Bucaramanga.