Con la popularidad en aumento del café frío o “cold brew”, cada vez más personas están descubriendo los múltiples beneficios que ofrece esta bebida. No solo se trata de una opción refrescante en los días calurosos, sino que también brinda ventajas específicas para la salud y el bienestar.
Uno de los beneficios más destacados del café frío es su menor acidez en comparación con el café caliente. Esto ocurre, debido a que al prepararse en frío, el café libera menos ácidos, lo que resulta en una bebida más suave y menos irritante para el estómago. Esto lo convierte en una excelente alternativa para quienes sufren de problemas gastrointestinales o acidez estomacal.
Por otro lado, esta bebida fría suele contener una mayor concentración de cafeína. Gracias al proceso de infusión que implica, el cual que puede durar entre 12 y 24 horas. Este factor proporciona un impulso energético más prolongado y efectivo. Otra característica que el agua fría brinda al café es el sabor que tiende a ser más dulce y menos amargo. Pues los compuestos que le otorgan su amargor no se extraen de la misma manera.
Al igual que el café caliente, también es rico en antioxidantes. Se trata de compuestos fundamentales, pues ayudan a combatir los radicales libres en el cuerpo, protegiendo las células y reduciendo el riesgo de enfermedades crónicas como las cardiovasculares y el cáncer. Según investigaciones el consumo moderado, puede reducir el riesgo de ciertas enfermedades crónicas, incluidas la diabetes tipo 2, las enfermedades cardíacas, el cáncer de hígado y el endometrio, así como la enfermedad de Parkinson y la depresión.
Durante épocas calurosas, el café frío es una excelente opción de hidratación ya que al combinarlo con hielo, no solo se logra una bebida refrescante, sino también una forma adicional de consumir líquidos durante el día. Otro punto a favor es su facilidad de preparación.
Cabe señalar que puede requerir más tiempo que el café caliente, sin embargo es muy sencillo y puede realizarse en casa. La receta más común implica mezclar café molido con agua fría, dejar reposar la mezcla en el refrigerador por un periodo determinado y luego filtrarlo.
¿Cómo preparar un café frío?
Ingredientes
- 100 gramos de café molido.
- 1 litro de agua fría.
- Hielo (opcional).
- Leche o edulcorante al gusto (opcional).
Método de preparación
- Utilizar café molido grueso.
- Mezclar bien el café molido con agua fría.
- Tapar el recipiente y dejarlo reposar en el refrigerador durante al menos 12 horas.
- Después del tiempo de reposo, filtrar la mezcla.
- Una vez filtrado, el café frío está listo para servir. Puede disfrutarse solo o agregar hielo, leche y edulcorante al gusto.
Otro plus del “clod brew” es que puede guardarse en una botella y conservarse menos de una semana.