Chris Swecker, ex subdirector del Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés), opinó el pasado 26 de julio que “el gobierno mexicano es cómplice de los cárteles de la droga”.
Un día después de la sorpresiva detención o entrega de Ismael El Mayo Zambada y de Joaquín Guzmán López, ambos líderes del Cártel de Sinaloa, en un aeropuerto privado de Santa Teresa, Nuevo México, muy cerca de El Paso, Texas, en los Estados Unidos, el ex alto funcionario del FBI declaró en entrevista con NewsNation que las autoridades mexicanas son cómplices de los cárteles de la droga.
“Cualquiera que haya perseguido delitos relacionados a las drogas por tanto tiempo, como lo hice en la frontera y en Miami, cuando toda la acción estaba ocurriendo en el sur de Florida, sabe que la razón por la cual toda la actividad se fue para México es porque se puede corromper al gobierno mexicano y establecer rutas para el tráfico sin que nadie te moleste,” explicó el también agente especial.
El ex subdirector de la División de Investigación Criminal del FBI expresó que la forma en que los cárteles de la droga operan es comprando “a los federales, a los presidentes municipales, policías, servidores públicos y hasta los que están muy arriba,” al tiempo que añadió que “la pregunta no es si el gobierno los está ayudando, ellos son parte de los cárteles”.
Respecto a la captura o entrega del cofundador del Cártel de Sinaloa y del hijo de El Chapo Guzmán Loera advirtió que las cosas se pondrán violentas dentro de las organizaciones criminales.
“Típicamente cuando haces arrestos como estos, de alto nivel, uno de los grandes líderes del Cártel de Sinaloa, la organización de El Chapo, las cosas tienden a ponerse violentas, aún más, y la violencia es la norma en México. Cuando sacas a líderes del cártel otros líderes comienzan a comprar poder, los rivales se empiezan a mover y las cosas comienzan a ser extremadamente sangrientas”, declaró.
Una de las versiones que circula en medios de comunicación sobre el arresto de los cabecillas del Cártel del Pacífico es que el FBI y el Departamento de Seguridad Nacional de EEUU estuvieron trabajando de uno a tres años para que Joaquín Guzmán López se entregara a las autoridades norteamericanas.
Según estas versiones, los agentes encubiertos habían perdido la esperanza de que esta captura se diera, cuando el jueves 25 de julio recibieron un mensaje de Guzmán López, hermano de Ovidio, El Ratón, diciendo que viajaba a los Estados Unidos con alguien más, El Mayo Zambada.
Todavía no está claro cómo se dio este arresto, no se sabe si fue un operativo de las agencias de investigación estadounidenses, si fue una entrega o un secuestro de Joaquín Guzmán López a su padrino y compadre de su padre El Mayo Zambada.
El mismo día que el ex subdirector del FBI hizo las declaraciones antes descritas, el gobierno de México aseguró que “no participó” en el operativo de Estados Unidos para detener a los dos líderes del Cártel de Sinaloa.
“El Gobierno de México no participó en esta detención o entrega, esto no es así, y vamos a seguir colaborando con el Gobierno de Estados Unidos, como lo hemos hecho hasta esta ocasión,” declaró la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Rosa Icela Rodríguez, en la conferencia matutina desde Palacio Nacional.
Tras efectuarse las primeras audiencias ante las autoridades norteamericanas, El Mayo Zambada y Joaquín Guzmán López se declararon no culpables de todos los cargos en su contra por narcotráfico.
En la Corte del Distrito Norte de Illinois, el hijo de Joaquín El Chapo Guzmán e integrante de Los Chapitos, compareció ante la jueza Sharon Johnson Coleman donde escuchó cada uno de los cargos que el gobierno de EEUU sostiene en su contra, pero el narcotraficante se declaró inocente.
Jeffrey Lichtman, abogado del hijo de El Chapo, declaró que su cliente no está acusado de secuestro: “No está siendo acusado de secuestro. Tómenlo como alguien que sabe, no como alguien que cree que sabe o como una fuente anónima,” aseveró.
En tanto, Zambada García también se declaró inocente el pasado 26 de julio, pero en la Corte de Distrito Oeste de Texas.
Ahí, Frank Pérez, abogado de El Mayo, reveló a Los Angeles Times que su cliente fue obligado a viajar a Estados Unidos: “No tengo comentarios que hacer, salvo señalar que no se entregó voluntariamente. Fue entregado contra su voluntad,” declaró.
Guzmán López fue citado en corte el próximo 30 de septiembre de 2024, mientras que El Mayo volverá a comparecer en la Corte de Distrito Oeste de Texas este 31 de julio.