A los 14 años, Fernando Tejero decidió abandonar su Córdoba natal y dejar su trabajo en la pescadería de su padre para poner rumbo a Madrid y perseguir su sueño: ser actor. Su vida no ha sido fácil. Desde muy pequeño su tía se hizo cargo de él por la enfermedad de su madre, ha sufrido bullying, depresión y durante muchos años ha escondido su condición sexual por miedo a la opinión de la sociedad y de su familia.
A sus 57 años, el intérprete puede presumir de ser uno de los actores más consolidados de nuestro país, con más de 25 películas a sus espaldas, decenas de series e incluso un Goya a mejor actor revelación por su papel en Días de fútbol. Ahora añade un nuevo título a esta extensa carrera, el film Historias, que se ha presentado hoy en ‘El Hormiguero’ de Pablo Motos y que se estrenará el próximo 24 de julio.
Te puede interesar: Quién es Hugh Grosvenor, duque de Westminster: ahijado de Carlos III y el hombre más rico de Reino Unido (por delante del rey)
“Un niño prestado”
A los nueve meses, el artista, el pequeño de seis hermanos, tuvo que irse a vivir con su tía como “un niño prestado”, después de que su madre enfermara. En un principio, iba a ser sólo una temporada, pero acabó viviendo con ella hasta los 14 años.
Cuando esta falleció a causa de un cáncer, Tejero tuvo que volver a vivir con sus padres y reconoce que afrontar su pérdida fue uno de los momentos más difíciles de su vida. Durante estos años descubrió su homosexualidad, pero según relató en el programa Masterchef Celebrity era una época complicada para España. “Viví diez años de Franco, viví la Transición y yo no fui yo hasta que llegué a Madrid. Tenía mucha pluma, me insultaban, me llamaban maricón”, contaba el cordobés.
A esta complicada infancia, se le sumó un capítulo oscuro, fue víctima de una violación cuando tenía seis años, tal y como confesóen una entrevista en La Ventana de la Cadena Ser. “Un chico mayor que yo, abusó de mí sexualmente”, recordaba entre lágrimas. Aseguraba que había conseguido superar este trauma con los años y gracias a “mucha terapia y mucho psicólogo”.
“Un poquito de por favor”
Durante seis temporadas y 92 capítulos, dio vida a Emilio en una de las series más icónicas de la historia de la televisión española, Aquí no hay quien viva. Sin duda, hubo una frase a un personaje pegada: “Un poquito de por favor”, una oración que el portero de Desengaño 21 no dejó de repetir. Aunque, ya no nos podamos imaginar al actor en la piel de otro personaje, en un primer momento, iba a interpretar a Paco, el del videoclub. Fue el propio Tejero el que insistió para que le dejaran ser el portero de la finca.
Te puede interesar: Quién es Alejandra Silva, la novia gallega de Richard Gere: su persistente lucha por los derechos humanos y su relación con el Real Madrid
Años más tarde, se volvió a unir a los hermanos Caballero, en la sexta temporada de La que se avecina, para meterse en el papel de Fermín Trujillo, el padre de Lola.
Los tres amores de Fernando Tejero
El actor ha mencionado en repetidas ocasiones que él prefiere mantener su vida más privada en un segundo plano y critica que le sacaran “del armario de una patada”. Antes de que la opinión pública supiera que era homosexual, mantuvo una relación con el sevillano, Miguel Ortiz, conocido por coronarse Mr. Gay España en 2021. La ruptura fue muy dolorosa para Tejero, que incluso confesó que le había sumido en una profunda depresión.
Años después, recuperó la ilusión con el músico murciano Pascual Cantero, más conocido como Muerdo. Tras dos años de relación, tomaron caminos diferentes y esta separación tampoco fue muy amigable. Durante estos años, se ha rumoreado una relación con Pol Badía, el ex del maestro Joao, sin embargo, el actor desmintió que entre ellos hubiera cualquier tipo de vínculo.
