La calificadora internacional Fitch Ratings nuevamente rebajó la nota crediticia de Petroperú de B+ a CCC+, tras argumentar que la empresa enfrenta una grave crisis de liquidez, debido a que el efectivo que se prevé generar este 2024 resultará insuficiente para cubrir los pagos de su deuda.
“La empresa se ve obligada a depender en gran medida de fuentes de financiación externas para evitar el incumplimiento. Fitch ha proyectado un Ebitda de US$119 millones para 2024 frente a pagos de deuda que ascienden a US$175 millones”, sostiene la calificadora de riesgo.
De acuerdo al análisis, la petrolera estatal experimenta una tasa de consumo de efectivo mensual de alrededor de US$200 millones durante este período, mientras que la refinería de Talara permanece no operativa, lo que conduce a un déficit de efectivo previsto de US$280 millones, incluso después de recibir un préstamo de US$800 millones desembolsado a principios de año.
“Esto evidencia una tensión de liquidez que podría dar lugar a un evento similar a un incumplimiento que refleje una calificación de cc”, señala Fitch.
Deuda de Petroperú supera los US$5.000 millones
El exministro de Economía, Luis Miguel Castilla explicó que la reducción en la participación del mercado de Petroperú influyó en la reciente baja calificación que obtuvo la empresa estatal por parte de Fitch Ratings.
“Esto es un descenso que refleja un riesgo que no pueda servir su deuda “abultada” de US$5.700 millones y no tiene capacidad de generar ingresos que hagan enfrenten ese endeudamiento”, explicó el extitular del MEF en Canal N.
Entre las causas que apunta Castilla es la falta de operación de la Refinería de Talara y por consecuencia no genera los ingresos previstos. “Lo segundo y creo que fue uno de los factores que gatilló este deterioro en la calificación, es que la participación de mercado ha rebajado de 45% como abastecedor de refinamiento a 25%”, manifestó Castilla.
Gobierno seguirá apoyando a la petrolera
La noticia sobre la rebaja de la calificación crediticia apareció poco después de que el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) enviara un comunicado importante a Fitch Ratings, en donde le aseguraba que el Gobierno de Dina Boluarte seguirá proporcionando apoyo económico y financiero a la compañía petrolera para garantizar su sostenibilidad. Por su parte, el ministro de Energía y Minas, Rómulo Mucho, declaró que será necesario mantener el apoyo a la petrolera tras la reducción de su calificación crediticia.
En ese sentido, Fitch no anticipa un apoyo sustancial del gobierno para la estructura de capital de Petroperú en el corto plazo. Para la calificadora, pese a que el gobierno proporcionó liquidez en 2022 para satisfacer las necesidades inmediatas, estas medidas no abordaron el problema fundamental del elevado endeudamiento.
Además, apunta que los desafíos operativos relacionados con el cronograma de finalización de la Refinería de Talara y las demandas de efectivo de su puesta en marcha han llevado a mayores necesidades financieras que la compañía deberá satisfacer de fuentes externas en 2024.
“Petroperú ha solicitado US$ 2.500 millones al gobierno y ha recibido una respuesta tibia: un préstamo de US$800 millones del Banco de la Nación y un aumento de las garantías existentes de US$500 millones a US$ 1.000 millones. Estas medidas abordan problemas de liquidez inmediatos, pero no resuelven las deficiencias estructurales del balance”, concluye el reporte de Fitch.
Esta reevaluación se sustenta en la importante pérdida de participación de mercado de Petroperú, que cayó del 45% al 25%. Esta disminución subraya la disponibilidad de fuentes alternativas para que el país obtenga productos refinados, lo que sugiere una menor dependencia de Petroperú para este propósito.
La pérdida de participación de mercado del 45% al 25% ha resultado en una perturbación mínima, contrariamente a las expectativas, y el acceso a combustibles importados sigue siendo una opción viable.
En cuanto al riesgo de contagio, Petroperú es calificado como ‘Fuerte’ ya que la empresa estatal tiene un alto perfil para su gobierno, dado su rol y estatus. “Es probable que su incumplimiento perturbe el acceso (o el costo) del financiamiento para el gobierno o sus otras ERG”, indican.
Respecto a la liquidez restringida, Fitch sostiene que Petroperú enfrenta una grave crisis de liquidez ya que el efectivo que se prevé generará dentro del año no será suficiente para cubrir los pagos de su deuda. En consecuencia, la empresa se ve obligada a depender en gran medida de fuentes de financiación externas para evitar el incumplimiento. Fitch ha proyectado un EBITDA de 119 millones de dólares para 2024 frente a pagos de deuda que ascienden a US$175 millones.