El pasado primero de octubre, la ciudad de Barranquilla fue escenario de un violento suceso vinculado a la guerra de los Pepes contra los Costeños.
En un conjunto residencial se desató un intenso tiroteo que cobró la vida de Jorge Leonardo Gutiérrez Blanco y dejó herido a Mairón José Bustamante Pérez, cuñado de Digno Palomino, líder de una banda de extorsionistas actualmente encarcelado.
Tras el ataque ocurrido en el conjunto residencial Alameda Campestre, presuntamente dirigido contra Mairón José Bustamante Pérez, de 28 años, cuñado de Digno Palomino Rodríguez, el bando de “Los Pepes” lanzó amenazas a través de redes sociales advirtiendo que irán tras los familiares de los miembros del grupo rival.
Este nuevo capítulo en la violenta disputa que ambas estructuras criminales mantienen desde hace aproximadamente dos años, y que ya ha cobrado más de setecientas vidas en Barranquilla y su área metropolitana.
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Según EL Heraldo, el violento ataque armado perpetrado el martes fue un acto premeditado y meticulosamente planificado. El objetivo era vulnerar los esquemas de seguridad del conjunto residencial para asesinar a un individuo cercano y de entera confianza de Palomino, quien fungía como administrador de las finanzas del grupo delictivo.
De acuerdo con las investigaciones preliminares, las autoridades barajan como principal hipótesis que este violento suceso se enmarca dentro de las represalias que se desprenden del cruento enfrentamiento entre los grupos delincuenciales autodenominados “Los Costeños” y “Los Pepes”, cuyas actividades ilícitas han asolado Barranquilla y los municipios aledaños en su área metropolitana.
Tras el cruento ataque, los peritos forenses constataron que Jorge Leonardo Gutiérrez Blanco había fallecido de manera instantánea debido a los al menos 14 impactos de bala que presentaba su cuerpo. En cuanto a Mairón José Bustamante Pérez, se confirmó que dos proyectiles lo alcanzaron en el pecho y la espalda, siendo posteriormente trasladado con urgencia a la Clínica Portoazul para recibir atención médica.
Ante el violento ataque registrado, la Policía Nacional actuó con celeridad logrando la captura de un sospechoso e incautando dos armas de fuego vinculadas al hecho. El coronel Dave Figueroa, comandante operativo de la Policía Metropolitana, destacó la importancia de la colaboración ciudadana, cuyo aporte resultó fundamental para impulsar los avances en la investigación en curso.
De igual manera, las autoridades confirmaron la captura de Sebastián Arias Sepúlveda, un hombre de 25 años presuntamente vinculado al grupo delictivo conocido como “Los Costeños”. Arias Sepúlveda conducía una camioneta Renault Duster, que ingresó al conjunto residencial del norte de Barranquilla, donde ocurrió el atentado. En el vehículo se halló un arma de fuego, una pistola Glock calibre 9 milímetros, presuntamente utilizada en el ataque.
El violento ataque dirigido contra Mairón José Bustamante desencadenó que desde las filas leales a Palomino se difundiera a través de redes sociales un amenazante mensaje advirtiendo represalias contra la estructura criminal antagónica conocida como Los Costeños. “… A partir de este momento comenzará una guerra sin retorno, o se acaban ellos o nos acabamos nosotros… Castor, así como atacas a mi familia, voy a atacar la tuya, prepárate…”, dijeron.
También anticiparon la emisión de un próximo comunicado en el que revelarían los nombres de todos los colaboradores e integrantes de los costeños en una clara advertencia de las represalias que estarían por venir.
Por otro lado, días antes, circuló por redes sociales otro mensaje intimidatorio proveniente de las filas de “Los Costeños” dirigido a su rival, “Los Pepes”. Este comunicado surgió tras el asesinato de Enrique de Jesús Barraza Barrios, un comerciante de 54 años que la noche del 28 de septiembre fue acribillado a tiros por hombres fuertemente armados.
Según cifras de la Oficina de Seguridad y Convivencia Ciudadana de la Alcaldía de Barranquilla, al cierre del mes de julio se registraron 247 casos de homicidio intencional en la ciudad, lo que representa un preocupante aumento de 37 casos más en comparación con el mismo periodo del año anterior, es decir, un incremento del 18%.