El presidente interino del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Vicente Guilarte, ha reconocido que el órgano de gobierno de los jueces ha dado “algún ejemplo” que no ha ayudado a la independencia judicial al haberse formado “ciertos bloques”.
Así se ha expresado Guilarte durante su intervención en el diálogo titulado ‘Instituciones del Estado Democrático de Derecho’ que ha acogido este jueves la Fundación Rafael del Pino, y en el que han participado también la ex fiscal general del Estado Consuelo Madrigal; el catedrático de Derecho Constitucional y Magistrado Emérito del Tribunal Constitucional de España Manuel Aragón; y el catedrático de Derecho administrativo de la Universidad Pompeu Fabra Andrés Betancor.
En palabras de Guilarte, en el Consejo se formaron “ciertos bloques” aunque él trató de decir que era el “bloque mixto”. “Tenemos que valorar en qué medida estamos ayudando o no estamos ayudando a la voluntad de la independencia, porque sí es evidente que el Consejo debe proteger la independencia frente a los ataques concretos”, ha manifestado.
Al ser preguntado por el bloqueo del CGPJ, que lleva cinco años caduco, Guilarte ha lamentado que este hecho suponga una “degradación institucional” que se percibe como “algo muy complejo que no tiene salida” y que “está degradando a la judicatura”, ha señalado, para defender acto seguido la vuelta a un Consejo “en plenitud de facultades e independiente”.
En este punto, el presidente interino ha considerado que el “problema” es la “apetencia política” que pretende conseguir su “cuota mayoritaria” en el Consejo. “Eso se aprecia y, claro, tener dos cuotas mayoritarias es muy difícil. No lo tienen fácil mientras no cambien su idea”, ha señalado.
Asimismo, ha defendido la discrecionalidad en los nombramientos de altos cargos y que se hagan bajo el principio de “mérito y capacidad” y que, en todo caso, sean los jueces los que tengan una “participación directa” en la elección de los propios jueces de determinadas instituciones. “Si conseguimos eso hemos dulcificado las apetencias del poder político por captarnos”, ha subrayado.
En otro punto, preguntado por el rol de los ciudadanos en cuanto a la independencia de los jueces, Guilarte ha admitido que siente el “apoyo” de los ciudadanos a pie de calle. No obstante, ha lamentado que “el riego” de lo que le llega a la ciudadanía a través de los medios de comunicación hace que ese rol sea “difícil”, “objetivo” o “constitucional”. “Las terminales mediáticas de la política cada vez son más fuertes y yo creo que eso es lo que malicia bastante al sistema. La política cree que captar al Poder Judicial es casi una obligación suya”, ha apostillado.
“NINGUNA INSTITUCIÓN ES SOBERANA”
Por su parte, Manuel Aragón, que ha sido el primero en tomar la palabra, ha recalcado las dos condiciones específicas que deben regir en las instituciones: imparcialidad e independencia y, además, ha continuado, “tienen que ser conscientes de que sus poderes están limitados, pero no solo por el control mutuo sino por la Constitución”.
Al hilo, ha insistido en que ninguna institución es soberana, ni siquiera el Parlamento y que todas ellas tienen su poder limitado por la Constitución. “De tal manera que la idea de la soberanía parlamentaria es una auténtica falacia. No hay ninguna democracia parlamentaria en la que el Parlamento sea soberano”, ha continuado, algo que, de ser así, según ha explicado, conduciría al “despotismo”.
Unas palabras que han sido también apoyadas por Consuelo Madrigal en sus intervenciones, que ha hecho hincapié en la importancia del principio de imparcialidad del Ministerio Fiscal y que ha alertado de que el problema no es que el Fiscal General del Estado sea nombrado por el Gobierno sino que una vez nombrado “siga o pueda seguir siendo un servidor del Gobierno o vasallo”, ha manifestado.
El acto se ha llevado a cabo con motivo de la publicación de la obra titulada ‘Instituciones del Estado Democrático de Derecho, Conversaciones. Contribución a la cultura cívica de la institucionalidad democrática’, coordinada por Andrés Betancor, al que han asistido, entre otras personalidades, la diputada del PP Cayetana Álvarez de Toledo.