Jerusalén, 5 sep (EFE).- El grupo islamista Hamás, que controla Gaza, reiteró este jueves que Israel debe retirar a todas sus tropas de la frontera entre la Franja y Egipto, el llamado Corredor de Filadelfia, si quiere un pacto de cese el fuego que permita la liberación de 97 rehenes que aún mantiene cautivos en el enclave palestino.
“Cualquier acuerdo debe incluir un cese total de la agresión contra nuestro pueblo palestino, una retirada total de la Franja de Gaza, incluido el Corredor de Filadelfia, la libertad de retorno de las personas desplazadas, ayuda (humanitaria) para nuestro pueblo y la reconstrucción de lo que la ocupación ha destruido”, dijo Jalil al Haya, miembro del buró político de Hamás y jefe de su delegación negociadora.
Solo si se cumplen estas condiciones se podría considerar “un acuerdo serio y genuino de intercambio de prisioneros”, añadió el funcionario en un comunicado difundido por Hamás, haciendo referencia a la entrega de rehenes israelíes a cambió de la liberación de palestinos presos en cárceles israelíes.
Estas declaraciones se enfrentan con las del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, quien insistió ayer en que para liberar a los rehenes se tiene que “controlar el corredor de Filadelfia”, alegando que cualquier acuerdo sin esa premisa sería una amenaza para los israelíes.
Hamás e Israel se acusan mutuamente de no acatar sin nuevas demandas la propuesta de cese el fuego que extendió el presidente estadounidense, Joe Biden, en mayo pasado.
“No necesitamos nuevas propuestas, y cualquier sugerencia debe centrarse en obligar a Netanyahu y a su Gobierno fascista a implementar lo que ya se ha acordado, en lugar de volver al punto de partida”, recalcó Al Haya, al asegurar que “se ha hecho evidente” que el primer ministro israelí es el “únicos obstáculo en las negociaciones”.
Netanyahu volvió al poder en diciembre de 2022 gracias a una coalición con partidos de ultraderecha liderados por colonos antiárabes simpatizantes de la supremacía judía, quienes se oponen vehementemente a cualquier tregua por considerarla una “rendición” ante Hamás.
La oficina de Netanyahu informó este jueves que el primer ministro daría una entrevista a la cadena estadounidense Fox y, según la prensa israelí, dijo en ella que el acuerdo para la tregua “no está cerca”.
Hace unos días, Biden dio a entender ante periodistas que Netanyahu no está cediendo lo suficiente para alcanzar un acuerdo.
Sin embargo, el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, dijo hoy que “el mayor obstáculo para lograr un acuerdo de alto el fuego es Hamás”.
El 31 de agosto, el Ejército israelí halló en el sur de Gaza los cadáveres de seis rehenes, entre ellos un ciudadano estadounidense, quienes -según la autopsia oficial israelí- fueron “asesinados por terroristas de Hamás con varios disparos a corta distancia” un día o dos antes de ser encontrados por los soldados.
La indignación de los familiares de los rehenes alcanzó un nuevo pico y convocaron a masivas manifestaciones para exigir una tregua y la dimisión de Netanyahu.
Este mismo jueves, unas 300 personas marcharon en Tel Aviv con ataúdes falsos envueltos en la bandera israelí, en alusión a los rehenes muertos en cautiverio en Gaza.
La guerra estalló el 7 de octubre del año pasado con un ataque de Israel contra Hamás que dejó 1.200 muertos y 251 secuestrados.
En noviembre pasado, las partes firmaron una tregua de una semana que permitió la liberación de 105 rehenes a cambio de 240 presos palestinos, y se estima que actualmente aún quedan en Gaza 97 secuestrados, de los cuales más de 30 estarían muertos.