Iberdrola obtuvo un beneficio neto en el primer trimestre del año de 2.760 millones de euros, lo que supuso un 86% más que en el mismo periodo del año pasado, impulsado por las plusvalías generada por la venta de parte de su negocio en México, que sumaron 1.165 millones de euros, y por la recuperación del déficit en su negocio comercial de Reino Unido que fue de 238 millones de euros. Sin tener en cuenta estos dos factores sus beneficios habrían aumentado un 28%, según ha informado la energética a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
En cuanto a las ventas del grupo se situaron en 12.678,5 millones de euros, un 18 % menos que un año antes, y el ebitda reportado se situó en 5.857 millones. Excluyendo también los dos efectos de México y Reino Unido esta partida creció un 10% debido al buen comportamiento de todas las geografías y negocios.
Destacaron el impacto de los nuevos marcos de redes en el Reino Unido, los Estados Unidos y Brasil, el positivo comportamiento de la generación renovable en la Península Ibérica, que ha alcanzado máximos de una década gracias la nueva capacidad instalada y al incremento de las energías renovables gestionables, además del crecimiento del 16% en la producción eólica marina, gracias a la entrada de nueva potencia.
Ante estas cifras, el presidente de Iberdrola, Ignacio Galán, ha asegurado que “muestran la solidez del modelo de Iberdrola y el impacto positivo de las inversiones incluidas en nuestro Plan 2024-26″. Considera que “la buena evolución de nuestros negocios en el primer trimestre, unida al crecimiento de las inversiones ya en curso, nos permiten además mejorar nuestras previsiones para el conjunto del ejercicio 2024″.
((Noticia en ampliación))