Irán realizó este martes por la tarde una serie de ejercicios militares navales en el norte del país, en medio del creciente temor por un ataque a Israel tras la eliminación del alto mando de Hamas Ismail Haniyeh. Las maniobras tuvieron lugar entre las 19:30 y las 20:30 hora local en la provincia de Gilan, en el mar Caspio.
Según citó el medio Mehr a un funcionario local, el objetivo de las tareas fue reforzar la preparación defensiva de las fuerzas navales.
Con éstos, ya son dos los ejercicios militares ordenados por el régimen persa dentro de su territorio en menos de una semana. Los primeros tuvieron lugar el pasado 8 de agosto, cuando las autoridades pidieron a las aerolíneas comerciales no sobrevolar el territorio de Teherán durante dos franjas horarias del día.
Todas estas acciones se enmarcan en la antesala de la tan anunciada represalia por parte del régimen tras la explosión en su territorio a finales de julio, que acabó con la muerte de Haniyeh. Si bien la acción no fue reconocida por Israel, Irán no dudó en culparlo y prometer un fuerte “castigo”.
“Se han llevado a cabo los preparativos para un castigo severo a un régimen (Israel) que no entiende más que el lenguaje de la fuerza”, dijo días atrás el asesor político del líder supremo de Irán, Ali Shamkhani.
Asimismo, más temprano este martes, el país rechazó los reclamos de líderes de la comunidad internacional como Estados Unidos, Francia, el Reino Unido, Italia y Alemania, para que “renuncie a sus continuas amenazas de un ataque militar contra Israel”. Sin embargo, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Naser Kanani, sostuvo que “un pedido así no tiene lógica política y es totalmente contrario a los principios y reglas del derecho internacional”.
“La República Islámica está determinada a defender su soberanía (…) y no pide la autorización de nadie para utilizar sus derechos legítimos”, insistió al ratificar su postura.
Israel, por su parte, aprobó planes en “diferentes frentes” para preparase para cualquier escenario posible, mientras que el Pentágono aumentó su presencia en la región, para brindar más apoyo a su aliado.
En este contexto, la Casa Blanca, advirtió que hay altas posibilidades de que se produzca una “serie de ataques” de Irán y sus aliados sobre el Estado judío esta misma semana, lo que podría tener “graves consecuencias” en la región y en las negociaciones en curso por una tregua en Gaza.
Washington, Doha y El Cairo instaron la semana pasada a Israel y Hamas a que se reúnan nuevamente este 15 de agosto para “cerrar todas las brechas restantes y comenzar la implementación del acuerdo sin más demora”, dado que “no hay tiempo que perder ni se pueden poner excusas para nuevos retrasos”.
Enseguida, Tel Aviv aceptó el pedido y confirmó el envío de una delegación a la cita aunque del lado terrorista rechazaron la iniciativa y se negaron a abordar “nuevas propuestas”. En su lugar, exigieron “aplicar” el plan presentado en mayo por Joe Biden, algo para lo que, en su momento, no se había conseguido consenso.
(Con información de Reuters)
