Después del doloroso momento de perder a su madre, Joaquín Torres se ha sentado esta tarde en el plató de ‘Y ahora Sonsoles’ para hablar de cómo está llevando la pérdida de la persona más importante de su vida y ha sorprendido porque ha desvelado la mala relación que hay con uno de sus hermanos.
“Estoy muy triste, me he quedado vacío, tengo mucho odio, estoy con un psiquiatra” comenzaba diciendo el arquitecto, que continuaba su relato desvelando que “mi madre muere perdiendo a su hijo pequeño, al que le confió todo, ella no quería sufrir más y el miércoles decidió dejarse”.
Tal y como ha desvelado, su madre se despide de todos sus seres queridos el viernes, pero no de su hijo pequeño porque “quería morir en paz” y es que la relación con éste no es nada cercana ya que quiso quedarse con todo el patrimonio que tenían sus padres y gestionarlo él solo.
El padre de Joaquín dejó a su hermano Julio como administrador único del conglomerado y “ha ido arruinando cada empresa, dejándolas a cero y endeudadas” y responsabiliza también a su padre: “Mi padre es gran responsable de lo que ha pasado, pero era su patrimonio, ha consentido y ha decidido”.
Una situación de lo más dolorosa ya que su madre le llegó a pedir ayuda hace tres años porque ya no querían seguir viviendo ya que no tenían ni para comer y el arquitecto se hizo responsable de todo en ese momento. Ante este contexto, todos los hermanos decidieron firmar un comunicado por petición de su madre con el fin de que se supiese lo que había ocurrido con todo.
En cuanto a cómo se encuentra del accidente que tuvo hace unos meses, Joaquín ha desvelado que “mal porque me tengo que operar de la cadera por tercera vez y tengo muchísimo dolor corporal”. Un momento complicado en el que está siendo egoísta “incluso con Raúl, que acaba de estrenar un programa” porque “para ser generoso tengo que estar bien”.
Y… sin esperarlo, el arquitecto desvelaba que “lo estamos pasando mal como pareja, no estoy a la altura y Raúl no sabe cómo ayudarme, ya no puede dar más… es el amor de mi vida, pero yo ahora necesito curarme”, terminaba confesando Joaquín.