Luego de tanta espera, finalmente esta mañana el Santuario Nuestra Señora de Lourdes, ubicada en Santos Lugares, abrió sus puertas y le permitió el paso a los cientos de fieles seguidores de la sanadora rosarina Leda Bergonzi que desde hace días se encontraban acampando en sus afueras. Lo hacían para conseguir el mejor lugar en la misa de sanación que se lleva adelante este sábado 18 de mayo, en la que se espera que la mujer de 44 años reciba y bendiga a los presentes.
Su arribo al partido bonaerense de Tres de Febrero fue minutos antes de las 12 del mediodía, el horario en el que se dio inicio a la tan esperada celebración encabezada por quien es conocida como “la mujer de los milagros”, la cual se transmite en vivo y se espera que dure toda la tarde. Leda subió al altar recién pasadas las 14, luego de una pequeña introducción a la jornada. Apenas un rato después, se sumó al coro y comenzó a entonar las letras de las canciones preparadas para la misa.
Pero, ¿quién es esta mujer que mueve multitudes? Tiene 44 años, es rosarina y quienes asisten todos los martes para que los toque en la Catedral de Rosario la llaman “la sacerdotisa” y aseguran que recibió los carismas de liberación y sanación por parte de la Iglesia Católica, que admite sus poderes milagrosos desde hace 9 años. Pero no es monja, no hizo votos religiosos, usa ropa simple, es ama de casa, madre de cinco hijos y ya tiene un nieto. Hasta la propia madre de Lionel Messi, Celia Cuccittini, la fue a ver.
Otra de sus seguidoras más famosas es la periodista Marcela Tauro, que la fue a ver esta semana a Rosario y dijo en Intrusos: “Leda es una sanadora laica que se presenta los martes nada más. Una amiga, que es la tercera vez que va, me dijo de ir y fuimos.. Empieza con una misa, con tres sacerdotes. La misa era a las 10, habrá sido 11 y pico que llegó ella… La gente cuando la ve, me hace acordar a Gilda, porque enloquece, la rodean, corren, la abrazan, lloran”.
Según narran las periodistas Sabrina Ferrarese y Araceli Colombo en su biografía, llamada Leda, la fe y la sanación, la mujer encontró su camino un día de 2015 mientras caminaba por su ciudad natal. Dicen que percibió algo profundo al ver el rostro de un hombre apoyado en la ventanilla de un colectivo. Esa imagen la llenó de una tristeza nueva y desconocida. Desde entonces, su vida cambió por completo. “Nuestro libro se centra en el fervor que ha despertado en miles de personas, los supuestos milagros que se le atribuyen y el crecimiento de su obra en Rosario y alrededores. Es un testimonio personal que refleja nuestra mirada hacia esta mujer, en quien reconocemos a una católica devota con la sorprendente capacidad de transmitir un mensaje renovado de una fe liberadora, que promueve una transformación profunda en las personas y las invita a vivir en paz y armonía”, le dieron las autoras a Infobae.
Según contaron ellas, Leda experimentó en ese momento, por primera vez, una cercanía inédita y espiritual hacia un extraño. Se le abrió una puerta hacia las almas, recibió un pase libre al mundo interior ajeno, sin quererlo ni pedirlo. Esta extraordinaria capacidad le fue dada, un regalo divino a través de la oración incesante que eleva diariamente al Dios de los católicos, la fe que profesa desde niña. Puede identificar el encuentro espiritual en el que vibró diferente, revivirlo con los ojos cerrados. Desde entonces, todo fue distinto, y adentrarse en los corazones dolientes o exultantes para medir sus latidos se volvió inevitable.