Los líderes del Nuevo Frente Popular (NFP) han asegurado haber salido “satisfechos” de la reunión que han mantenido este viernes en el Elíseo con el presidente francés, Emmanuel Macron, quien ha admitido que “es necesario un cambio de política”, según ha contado el líder de los comunistas, Fabien Roussel.
Macron ha inaugurado este viernes la primera ronda de consultas para formar gobierno con los vencedores de las pasadas elecciones legislativas, un NFP que ha trasladado el presidente francés estar preparados para comenzar a gobernar de la mano de su candidata, Lucie Castets.
Según ha trasladado Castets, Macron “reconoció que los franceses habían enviado un mensaje claro durante las elecciones legislativas”, mientras que ella le ha trasladado que está dispuesta a “construir coaliciones” y debatir con otras fuerzas políticas “para tratar de encontrar un camino que garantice la estabilidad”.
Para la líder de los ecologistas, Marine Tondelier, es una “señal favorable” que Macron admitiera que era necesario “cambiar el rumbo” y confía en que para el martes haya tomado ya una decisión “Hay emergencias y dejar pasar semanas sin abordarlas es grave e incluso irresponsable”, ha dicho, informa BFMTV.
En esa línea, el secretario general de los socialistas, Olivier Faure, ha destacado que “el presidente reconoció que estabilidad no significa continuar con la política actual” y que anunciará el nombre del próximo primer ministro “pronto”.
Por su parte, el coordinador de La Francia Insumisa, Manuel Bompard, ha contado que si bien Macron les ha recordado su “papel constitucional” como “árbitro” de todo este proceso, desde el NFP han salido con la impresión de que “tenía predilección por querer ejercer de seleccionador”.
Después de reunirse con el NFP, Macron recibirá en el Elíseo a las figuras de su partido, entre ellos el actual primer ministro en funciones Gabriel Attal; para después de verse con los conservadores de Los Republicanos. Ya el lunes, será el turno de la ultraderechista Agrupación Nacional.