La Justicia de Rusia ha imputado este viernes a un ciudadano francés detenido por supuestamente recopilar información sobre el Ejército ruso durante varios años, un día después de que las autoridades abrieran una causa en su contra por no haberse registrado como “agente extranjero” para trabajar en el país.
El Comité de Investigación, organismo ruso encargado de investigar la posible comisión de delitos, ha indicado que el acusado, identificado como Laurent Vinatier, habría violado el artículo 330.1 del Código Penal de Rusia al “evadir sus responsabilidades”, según informaciones recogidas por la agencia rusa de noticias Interfax.
Asimismo, ha indicado que solicitará a la Justicia que se impongan medidas cautelares contra el acusado, que “ha estado recopilando información militar durante años, incumpliendo la legislación que obliga a entregar una serie de documentos necesarios para el registro como agente extranjero”.
“Esta información recopilada, si es obtenida por fuerzas extranjeras, puede ser utilizada para poner en tela de juicio la seguridad del Estado. Por ese motivo ha estado visitando el territorio ruso, incluida Moscú, donde se ha reunido con ciudadanos rusos”, ha aseverado.
Aunque el Comité de Investigación no añade más detalles sobre la identidad del detenido, fuentes cercanas al caso han informado de que se trata que colabora con el Centro para el Diálogo Humanitario, una organización con sede en Suiza que está tratando de recabar todos los detalles sobre su situación.
El presidente francés, Emmanuel Macron, ha asegurado que el detenido no trabajaba para el Estado francés y ha confirmado su detención. En este sentido, ha expresado su preocupación por su seguridad, según informaciones de la cadena francesa TF1.