La marcha universitaria del miércoles 2 de octubre repetirá mucho de la forma y el contenido que tuvo la primera movilización de fines de abril. Cinco meses después, las reivindicaciones llevadas hasta las puertas de la Casa Rosada, lejos de haberse resuelto, se agravaron. De aquel pedido de más presupuesto, los mismos convocados llevarán reclamos aun más contundentes dirigidos al Gobierno pero también a los diputados. En la Plaza de los Dos Congresos, reclamarán al presidente Javier Milei que no vete la ley que les dio más fondos a las universidades y a los legisladores les reclamarán que defiendan esa norma aprobada por amplia mayoría. Pero también, que se frene la “campaña de desprestigio” contra las universidades.
Según pudo saber Infobae de fuentes involucradas en la organización de la marcha, el documento evitará dar nombres nombres propios. No está previsto que se mencione a Milei, ni a la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, como así tampoco al secretario de Educación, Carlos Torrendell; ni a Alejandro Ciro Álvarez, subsecretario de Políticas Universitarias. Como ocurrió en la primera marcha, la declaración la leerá Piera Fernández de Piccoli, presidenta de la Federación Universitaria Argentina (FUA) y Estudiante de Ciencia Política de la Universidad de Río Cuarto.
La dirigente estudiantil hablará después de que expongan los referentes de los sindicatos docentes y no docentes de las universidades y de la educación que se movilizarán al Congreso. Esta vez, a diferencia de lo que pasó con la convocatoria anterior, sólo darán discursos los representantes de las entidades gremiales que reclaman aumentos de salarios y la garantía del financiamiento para que funcionen las universidades. “El cierre va a estar a cargo de la FUA porque son los estudiantes los destinatarios de todos los esfuerzos. La educación pública es para ellos y para el futuro de la Argentina”, explicó una de los organizadores de la protesta.
La aclaración se debe a que en abril, por ejemplo, hubo discursos de tono político partidario que generaron sorpresa y rechazo. Un ejemplo fue el que dio Taty Almeida, de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora: “Perdimos una elección pero no nos han vencido”, dijo. “No es una crítica a nadie. Se tomó la decisión que sólo hablen los protagonistas de este conflicto para no desviar la atención y los reclamos”, explicaron.
Aunque el documento final no tendrá nombres propios, se espera que las palabras que pronuncien los dirigentes que representan a los sindicatos tengan fuertes cuestionamientos al gobierno de Milei y a la gestión de los funcionarios que están involucrados en la problemática universitaria. Un dato importante es que no habrá exposición de ningún representante del Consejo Interuniversitario Nacional, que preside Víctor Moriñigo.
La marcha estará encabezada por los estudiantes, los docentes y no docentes de universidades de todo el país, a los que se sumaron referentes y militantes de distintas organizaciones sociales y políticas. La mayoría, claramente, tienen un posicionamiento claramente opositor, como es La Cámpora, la CGT y la CTA, los movimientos sociales. Pero también se movilizará la UCR y otros partidos que tienen alineamientos inestables con el Gobierno.
A la Plaza de los Dos Congreso -el escenario estará ubicado donde termina la Avenida de Mayo, de espaldas a la Casa Rosada y de frente al Palacio Legislativo- llegará una columna de estudiantes, que va a salir de Plaza Houssay, irá por Avenida Córdoba hasta Callao y de allí hasta la zona de la concentración. La segunda columna se reunirá en la esquina de Entre Ríos y Belgrano, y estará formada por rectores del CIN, integrantes de la FUA, y sindicatos docentes y no docentes.
“El documento final tocará los reclamos y reivindicaciones de los docentes, los no docentes, los estudiantes, pero también va a subrayar la importancia para la Argentina del futuro de la ciencia y la tecnología”, explicaron las fuentes. “El motivo central va ser pedir al Gobierno que no sea vetada la Ley de Financiamiento Universitario. Es un mensaje hacia el Poder Ejecutivo, pero también es un mensaje a los diputados de la Nación”, continuaron.
Es que, ante la inminencia del rechazo a esa norma, “necesitamos que se ratifique en la Cámara baja, con los dos tercios de los votos su vigencia, para que no pase como lo que ocurrió con la reforma jubilatoria, que el veto quedó firme. Vamos a explicar cuál es la crisis que estamos atravesando y que la universidad pública quiere ser parte de la solución del problema de los argentinos. Creemos que tenemos un rol trascendental”, consideró uno de los que participó de su redacción.
“Se va a expresar que hay una pobre visión de futuro del gobierno en tratar de de cercenar la educación pública”, indicaron a Infobae. Pero un punto saliente es que exigirán “que se frene este ataque permanente que el gobierno tiene hacia las universidades; que frene el ataque que no es sólo porque le quita el financiamiento, sino que hay un ataque de desprestigio con la instalación de mentiras permanentes como fue la de estudiantes fantasmas que salió esta semana”.