Tomás Frutos
Roma, 20 ago (EFE).- La nueva ‘Juve’ de Thiago Motta, en un solo partido, el del apabullante estreno en Serie A ante el Como (3-0), ha bastado para ilusionar en Turín tras dos años negros llenos de polémicas extra deportivas, de ridículos en Europa, de sanciones a jugadores por apuestas y de sanciones al club por saltarse las normas financieras.
Las dos últimas temporadas de la ‘Vecchia Signora’ fueron un desastre. Desde una sanción por infringir las normas de mercado -plusvalías y fraude contable- que se saldó con 10 puntos en la tabla hasta el positivo en dopaje del francés Paul Pogba, pasando por las apuestas de Nicolo Fagioli, la polémica salida del argentino Paulo Dybala y el ridículo en Liga de Campeones ante el Maccabi Haifa que, a la postre, condujo a la eliminación en fase de grupos.
Dos años de caída libre, de una temporada 2021-22 sin títulos después de nueve seguidas reinando en Italia y de una 2023-24 sin competiciones europeas. Una época que supuso el fin de Andrea Agnelli como cabeza visible del club, el presidente de los nueve ‘Scudetti’ y de las dos finales de ‘Champions’.
También el presidente de un club que aseguró haber llegado a un acuerdo para reducir el salario de varios futbolistas en 2020 para ayudar con la situación económica provocada por la pandemia de COVID-19. Entre ellos estaba el portugués Cristiano Ronaldo.
Poco después, se descubrió no era como la ‘Juve’ explicó a las autoridades, sino un aplazamiento del pago de tres de los cuatro meses acordados (de marzo a junio) y, como dicho pago no apareció en el ejercicio económico de ese año, la Fiscalía lo consideró un delito de fraude fiscal.
Especial relevancia tuvo en este caso Cristiano Ronaldo, pues fue el acuerdo privado entre el luso y el club el que salió a la luz y el que obligó al Juventus a indemnizar al jugador del Al-Nassr con casi 10 millones de euros.
Dos años negros, pero que este lunes en el Juventus Stadium comenzaron a tener menos peso en el día a día juventino. Porque si bien es cierto que la pasada temporada se saldó con la Copa Italia y la vuelta a la Liga de Campeones, el mal juego durante toda la campaña y el despido de Massimiliano Allegri, fuera de sí durante la final copera pese a la victoria, empañaron lo conseguido.
La llegada de Motta, con el bagaje tan positivo que dejó en el Bolonia, al que metió en ‘Champions’, ya fue un alivio. El técnico llegó con ganas de revolución y, aunque la decisión de dejar fuera del proyecto al italiano Federico Chiesa no ha gustado a todos, el tiempo, por ahora, le ha dado la razón.
Porque la ‘Juve’ que se vio el lunes fue una que hacía mucho tiempo no se veía. Ya no solo por el resultado, que es idéntico al del inicio de la temporada pasada, sino por la manera de lograrlo. La sensación de superioridad constante, de mecanismos nuevos aprendidos en poco tiempo y de la nueva juventud que aparece como protagonista del proyecto deportivo.
Gatti (26 años), un jugador que en 2021 jugaba en Serie C, fue el capitán con la suplencia de Danilo. Se lo ha ganado a pulso. Di Gregorio (27), Cambiaso (24), Bremer (27), Cabal (23), Thuram (23), Mbangula (20), Yildiz (19) y Weah (24). Una alineación con una media de edad joven, que estuvo a la altura. Y con un gran Vlahovic arriba, al que solo le faltó el gol. Todo funcionó. De seguir así, si es capaz de mantener el ritmo exhibido, es clara candidata a todo en Italia.
Es solo un partido, pero la sensación que dejó la ‘Juve’ a su afición fue más que satisfactoria. Motta es cauto, la hinchada también. Pero esta nueva ‘Vecchia Signora’, por el momento, causa sensación en Turín tras una mancha negra en la historia de uno de los clubes más grandes de Europa que está tratando de dejar atrás. EFE
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