“Servir y proteger” es el lema que durante años siguieron más de una veintena de perros de diferentes razas y que ahora buscan un hogar digno después de ser relevados de sus funciones en diferentes departamentos del gobierno, según informaron a través de redes sociales empleados de Pennsylvania SPCA (PSPCA), organización sin fines de lucro basada en Pensilvania, Estados Unidos.
Antes de su jubilación, algunos de los caninos sirvieron en la primera línea de guerra, otros formaron parte de las fuerzas del orden de EEUU y algunos más mantuvieron a salvo a miles de personas mediante la detección de explosivos y sustancias peligrosas en los principales centros de transporte del país.
K-9 Hero Haven, organización de rescate ubicada en el condado de Northumberland, ofreció darles hogar, sin embargo, las condiciones en que vivían estaban lejos de ser las adecuadas para quienes durante años sirvieron fervientemente a su país.
Una vida de suciedad y abandono
Empleados de PSPCA señalaron el 24 de mayo a través del post en Facebook que una vez llegaron al que sería su nuevo hogar, se enfrentaron a un escenario desolador, pues “en lugar de recibir una jubilación feliz”, los casi 30 perros enfrentaron una vida de “suciedad y abandono”.
Fueron encargados del Bureau of Dog Law que, tras una inspección de rutina, descubrieron las condiciones en las que vivían los cánidos y rápidamente dieron aviso al equipo de aplicación de la ley animal de la PSPCA.
Los empleados encontraron que las perreras estaban cubiertas de heces y sangre, mientras que sus bebederos estaban “verdes” por falta de limpieza. “Los cuerpos que alguna vez fueron delgados y exudaban fuerza ahora se marchitaron debido a condiciones médicas no tratadas”, escribieron los encargados de las redes sociales de la organización.
Casi 30 pastores alemanes, belga malinois y un labrador retriever fueron recibidos en las instalaciones del refugio y, mientras voluntarios esperaban su custodia, los equipos médicos y de comportamiento unieron esfuerzos para curar las heridas físicas y emocionales que sufrieron aquellos perros que alguna vez sirvieron a su nación.
“Meses después, la dueña del refugio finalmente se declaró culpable de crueldad animal y le revocaron la licencia de su perrera. Desde entonces se han presentado aún más cargos de crueldad ante la oficina del fiscal de distrito”, se lee en el post.
¿Qué pasará con los antiguos héroes de guerra?
Nicole Wilson, directora de aplicación de la ley animal de la PSPCA, declaró en entrevista para el medio estadounidense NBC10 que la gente comienza en un camino en el que tiene “las mejores intenciones”, pero esos propósitos se pierden cuando “ya no pueden decir no”.
Según relataron los empleados de PSPCA, el enfoque principal del refugio es garantizar el mejor resultado posible de las mascotas bajo su cuidado y celebraron que algunos ya encontraron un hogar junto a sus antiguos cuidadores, mientras que otros llegaron hasta lugares tan lejanos como Alaska o Arkansas.
“Tenemos mucha suerte de celebrar las libertades que tenemos gracias a los humanos y caninos que sirven en primera línea. Estados Unidos es el hogar de los libres gracias a los valientes y finalmente ha llegado el momento de que estos valerosos perros obtengan lo que nos aseguraron: un hogar”, escribieron los empleados de la asociación.
Muchos de los perros siguen disponibles para adopción en la sede de Filadelfia de la PSPCA, según informaron empleados en la sección de comentarios de la publicación.
En EEUU, cada año se jubilan más de 10.000 perros que trabajan para la policía, el sheriff, departamentos de patrulla de carreteras, seguridad nacional, FBI u otras agencias pertenecientes a las fuerzas del orden, de acuerdo con cifras de la Retired Police Canine Foundation (RPCF), fundación encargada de apoyar a los dueños de caninos retirados mediante el costeo de tratamiento.