Las autoridades de la Franja de Gaza, controladas por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), han elevado este martes a cerca de 90 los muertos a causa de la nueva ofensiva desatada el lunes por el Ejército de Israel contra la ciudad de Jan Yunis, situada en el sur del enclave palestino.
La oficina de prensa de las autoridades gazatíes han indicado en un comunicado publicado en su cuenta en Telegram que durante las últimas horas se han confirmado 89 “mártires”, 263 heridos y 68 desaparecidos, por lo que se teme que la cifra de fallecidos pueda aumentar en las próximas horas.
Asimismo, han señalado que al menos trece viviendas se han derrumbado sobre sus habitantes a causa de los bombardeos de las fuerzas israelíes, cuya Fuerza Aérea ha atacado un total de 190 edificios, a lo que se suman otros 130 ataques con carros de combate y artillería.
“Condenamos la continuada comisión de estas horribles masacres por parte de la ocupación israelí contra civiles y desplazados”, han dicho, antes de hacer “totalmente responsables” a Israel y Estados Unidos de esta ofensiva y pedir a la comunidad internacional “que detengan inmediatamente estas masacres”.
Por su parte, el Ejército de Israel ha recalcado que durante la jornada del lunes inició “un ataque” contra la ciudad, apenas horas después de ordenar la evacuación de parte de la “zona humanitaria” establecida por las propias autoridades israelíes en Jan Yunis y sus alrededores.
Así, ha destacado a través de un comunicado publicado en su página web que durante las últimas 24 horas ha atacado “más de 50 infraestructuras terroristas” en la ciudad, “incluidos almacenes de munición, puestos de observación, edificios usados por terroristas de Hamás y una ruta de túneles”.
El Ejército ha apuntado además que un proyectil supuestamente lanzado por Hamás desde la “zona humanitaria” de Al Mauasi ha impactado en la propia Franja y ha insistido en que el grupo “viola de forma regular el Derecho Internacional y usa sistemáticamente edificios civiles y a los civiles como escudos humanos para llevar a cabo acciones terroristas contra el Estado de Israel”.
Israel desencadenó una ofensiva contra la Franja tras los ataques del 7 de octubre, que dejaron cerca de 1.200 muertos y unos 240 secuestrados. Las autoridades de Gaza, controladas por Hamás, han denunciado más de 39.000 muertos, a los que se suman más de 560 palestinos muertos en Cisjordania y Jerusalén Este en operaciones por parte de las fuerzas israelíes o en ataques perpetrados por colonos.