El Escuadrón Suicida, de James Gunn, es una de esas joyas escondidas del cine superheroico. Lastrada, quizá, por su antecesora, no logró el éxito de las superproducciones de Marvel, aunque sí recuperó el honor perdido tras las críticas que recibió la primera entrega. Ahora, está disponible en el catálogo de Netflix, convirtiéndola en una opción a tener en cuenta a la hora de elegir qué veremos en la pantalla junto a nuestros seres queridos.
Sin embargo, James Gunn, quien recientemente ha sido nombrado adalid del nuevo universo cinematográfico que planea construir DC, ha mencionado en reiteradas ocasiones que esta película también tiene una serie de secretos y curiosidades que la hacen, aún si cabe, más especial.
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Los secretos de ‘El escuadrón suicida’
Empezaremos, precisamente, por el título, y es que en un primer momento no se tenía pensado que la película se llamara El escuadrón suicida, sino Dogs of War, algo que puede apreciarse en los primeros borradores del guion. También en el reparto hubo algunas decisiones importantes que tomar antes de iniciar las grabaciones. Una de ellas, que Idris Elba no interpretara a Deathshoot, como en un principio se tenía pensado. Sin embargo, la posibilidad de que Will Smith, quien interpretó a este personaje en la película de 2016- volviera a la franquicia hizo que los responsables del proyecto se decantaran por asignar a Elba el personaje de Bloodsport, un mercenario encarcelado por disparar a Superman con kryptonita.
A quien no le cambiaron su personaje fue a Viola Davis, quien en entrevistas posteriores se declaró admiradora del personaje que interpretaba, Amanda Waller, directora del programa del Escuadrón Suicida. Según James Gunn, esta era, junto con el gobierno de EEUU, el verdadero villano de la película. “No había nadie mejor que Viola Davis”, dijo el director respecto a la oscarizada actriz.
Las afirmaciones de Gunn tienen sentido también en el aspecto canónico de la película. La primera vez que apareció el escuadrón de delincuentes fue en 1959, y estaba formado por un militar, un físico, un astrónomo y una doctora, todos ellos encargados de combatir contra monstruos. No obstante, en aquella ocasión no tuvo demasiado éxito, y no fue hasta finales de los 80 cuando la idea fue rescatada como una crítica a la política exterior ejercida por la administración de Ronald Reagan.
Por su parte, John Cena, a quien se puede ver en el papel de Peacemaker -con serie posterior incluida, debido al éxito del personaje-, probó suerte también en el casting de la primera película, en un principio, para un personaje distinto: Rick Flag. Además, no hay que olvidarse de que uno de los personajes más queridos, Rey Tiburón, tiene la voz de Sylvester Stallone.
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Grandes estrellas
Con todo, una de las decisiones más comentadas de la nueva versión de El escuadrón suicida fue la de prescindir de Jared Leto en el papel de Joker, fundamental a priori, ya que se trata del gran amor de Harley Quinn. Leto, cuya interpretación del mítico personaje del universo DC fue notablemente aplaudida -un gran mérito, sobre todo por la expectación que había tras el último Joker en el cine, encarnado por Heath Ledger-. Para el papel, el actor había cambiado muchos aspectos de su aspecto y personalidad, incurriendo, incluso, en algunos episodios especialmente locos.
Sin embargo, los méritos en la actuación de Leto, quizás junto a Will Smith el actor más conocido del reparto, fueron completamente eclipsados por la Harley Quinn de Margot Robbie, hasta el punto que ella fue la única que repitió en el plantel de actores para la secuela. Robbie ya era conocida por haber aparecido en El lobo de Wall Street, pero fue entonces, y también por su aparición en Érase una vez en Hollywood, cuando se convirtió en la estrella mundial que es ahora. De hecho, protagonizó también una película en solitario: Aves de presa (y la fantabulosa emancipación de Harley Quinn), la cual, a pesar del carisma del personaje y el talento de la actriz, no funcionó demasiado bien en las taquillas.
