Los koalas están en riesgo, cuáles son las amenazas que los llevan al borde de la extinción

Los registros de hospitales veterinarios en el sureste de Queensland, Australia, revelaron que la eutanasia fue el destino más común para los koalas admitidos, según un estudio de la Universidad de Queensland. Este análisis incluyó más de 50.000 avistamientos y admisiones hospitalarias de koalas entre 1997 y 2019.

Renae Charalambous, candidata a un doctorado en la Facultad de Ciencias de la UQ, lideró la investigación y destacó que enfermedades como la clamidia representaron casi el 30% de las admisiones. Las principales amenazas para los koalas derivaron de la pérdida de hábitat, lo que incrementó el riesgo de ataques de perros y colisiones con vehículos. “Solo el 25 por ciento de los koalas rescatados e ingresados fueron liberados en un hábitat adecuado”, explicó Charalambous.

Añadió que muchos de los animales murieron antes de llegar al hospital, y aquellos que lo lograron, en gran parte, fueron sacrificados por razones de bienestar.

Entre las causas de admisión más comunes, los koalas atropellados por vehículos representaron cerca del 20% del total. Estos tenían cuatro veces más probabilidades de ser encontrados muertos que de sobrevivir tras ser tratados.

Charalambous explicó que “los koalas que llegaban al hospital después de un accidente de tráfico tenían casi tres veces más probabilidades de ser sacrificados que de ser liberados”. Además, un 7% de los animales había sido atacado por perros, con una probabilidad doble de ser encontrados muertos en comparación con aquellos que llegaron vivos al hospital. Los que sobrevivían a los ataques caninos tenían también el doble de probabilidades de ser sacrificados que liberados.

El estudio reveló diferencias importantes según el estado y características de los animales. Los adultos, las hembras y los koalas con clamidia tuvieron un riesgo significativamente mayor de ser sacrificados que aquellos sin estos factores. En 2022, el marsupial pasó a ser catalogado como en peligro de extinción en Queensland, dado que las poblaciones habían disminuido a la mitad en la última década.

Charalambous afirmó que la comprensión de estos desafíos resultaba fundamental para guiar futuros planes de conservación. Subrayó la importancia de aprovechar esta oportunidad para abordar y mitigar las amenazas que enfrentan los koalas. “No es demasiado tarde para restaurar las poblaciones saludables de koalas”, comentó, agregando que espera que la investigación sirva para iluminar las lagunas existentes en las políticas actuales. De esta forma, se podrían dirigir las estrategias de intervención hacia la protección efectiva de los koalas restantes.

El trabajo también reconoció la colaboración de los doctores Kris Descovich y Edward Narayan, quienes hicieron valiosas aportaciones a la investigación. Los resultados de este análisis fueron publicados en la revista Society and Animals, donde se detalló cómo las admisiones hospitalarias reflejaban las crecientes amenazas para los koalas en la región.

La pérdida de hábitat, uno de los principales motores de esta disminución, se intensificó en los últimos años, como señaló el Departamento de Agricultura, Agua y Medio Ambiente del Gobierno de Australia. Las estimaciones de la población de koalas continúan siendo inciertas, debido a la naturaleza críptica de la especie y la dificultad de detección.

El estado de conservación de los koalas en Australia también estuvo marcado por la falta de un método único para estudiar a esta especie en estado salvaje. Según los expertos, la dificultad de detección y la falta de datos completos han hecho que muchas veces no se logre identificar correctamente el número total de koalas. A pesar de estos obstáculos, las investigaciones continuaron siendo esenciales para formular políticas de conservación informadas.

A modo de ejemplo, en 2020, el gobierno de Queensland implementó una estrategia de conservación específica para frenar el declive de las poblaciones de koalas en el sudeste del estado. Esta estrategia buscó lograr una ganancia neta en el área de hábitat, restaurar hectáreas para los koalas y reducir un 25% las enfermedades y lesiones que contribuyen a la mortalidad de la especie.

En estudios previos, se indicó que los tratamientos para las enfermedades que padecen los koalas, como la clamidia, siguen siendo limitados. Aunque algunos medicamentos han mostrado ser efectivos para mejorar la tasa de recuperación, el riesgo de disbiosis intestinal y otros problemas sistémicos a menudo resultó en la necesidad de eutanasia por razones de bienestar.

Esta investigación confirmó que los koalas enfrentaron múltiples amenazas interrelacionadas, donde las admisiones hospitalarias reflejaron la gravedad de la situación. La conservación de esta emblemática especie depende, según los expertos, de la implementación de políticas basadas en los datos científicos disponibles, y aún queda mucho por hacer para asegurar la supervivencia de los koalas en el sureste de Queensland y en toda Australia.