El 22 de agosto de 2024 se anunció que el proceso de restauración del emblemático hospital San Juan de Dios fue liquidado, luego que la Subred Centro Oriente rompiera de manera unilateral el contrato existente entre la Alcaldía de Bogotá y la española Sociedad Anónima de Obras y Servicios (Cosapa), que adjudicó en 2016 el exalcalde Enrique Peñalosa para restaurar el histórico complejo hospitalario.
El presidente de la República, Gustavo Petro, celebró la decisión y aseguró que el centro de salud de la capital del país se mantendrá en pie y no se terminará con su historia; aun cuando un grupo de expertos encargados de estudiar la obra señalaron que la torre central del complejo no hace parte de la estructura francesa que el Gobierno pretende proteger.
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“Se ha liquidado el contrato entre Copasa y la red hospitalaria centro/oriente de Bogotá, que pretendía dinamitar la torre central del hospital San Juan de Dios. Por ahora quienes querían desaparecer el hospital público más antiguo de Colombia no tendrán éxito”, comentó el presidente en su cuenta de X.
En respuesta a las declaraciones del jefe de Estado, la senadora de la República María Fernanda Cabal envió un duro mensaje al primer mandatario por celebrar una decisión que a largo plazo puede perjudicar económicamente al país.
“Petro hace lo que le viene en gana, viola la Constitución y la autonomía de las entidades territoriales”, escribió la parlamentaria, en su cuenta de X. Asimismo, hizo énfasis en las nefastas consecuencias que la medida involucra: “Con esta decisión está moviendo al Estado Colombiano a un pleito multimillonario.”, indicó.
A su vez, la congresista por el Partido Centro Democrático exigió respuestas sobre el responsable de una posible deuda con la empresa extranjera: “¿Quién paga? No será Petro, seremos todos los colombianos”, puntualizó.
La congresista no fue la única que criticó el accionar del presidente Petro y del agente interventor de la Subred Centro Oriente, Luis Óscar Galves. El alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, publicó un video en sus redes sociales en el que rechazó la finalización unilateral del contrato con Cosapa, ya que uno de los objetivos de su administración era recuperar el histórico centro hospitalario.
En paralelo, el mandatario local afirmó que con la decisión la salud de los capitalinos y el patrimonio de la ciudad se encuentran en riesgo. “En Bogotá somos respetuosos de las competencias de la Nación, pero nuevamente vemos con extrema preocupación algunas decisiones del Gobierno nacional sobre Bogotá”, aseveró en el clip.
Galán también criticó la decisión del Gobierno de autorizar la intervención de la Subred Centro Oriente el 7 de mayo de 2024, haciendo caso omiso al trabajo en conjunto entre el distrito y la Nación, cuyo objetivo era subsanar todas las fallas que ha registrado la subred.
“Quiero ser muy claro, esta decisión no protege la salud de los bogotanos, al contrario, pone en riesgo la prestación del servicio de salud, la estabilidad del sistema distrital de salud e impide la recuperación del San Juan de Dios, que ha sido ordenada en varias sentencias en los últimos años”, precisó el alcalde de Bogotá.
A propósito, señaló que el patrimonio de la ciudad también fue puesto en riesgo, ya que hay dos tribunales de arbitrario que defienden los intereses de la capital. Sin embargo, en estos momentos se ven afectados en su estrategia por la terminación del contrato. “Estos procesos sumados tienen pretensiones que ascienden a más de 100.000 millones de pesos”, subrayó.
En ese sentido, el alcalde Galán solicitó a la Procuraduría General de la Nación y a la Contraloría General de la República investigar si la decisión del agente interventor no impacta negativamente el patrimonio y la moralidad administrativa de la capital del país.
