La condición del primer ministro eslovaco Robert Fico está mejorando tras el atentado de la semana pasada que estremeció a la nación europea profundamente dividida en torno a sus políticas.
“Tras la consulta de hoy, la condición del paciente se ha estabilizado”, dijo el lunes el hospital donde está internado Fico, en la ciudad de Banská Bystrica.
Un parte difundido por la clínica dice que Fico está “mejorando clínicamente, se está comunicando, los parámetros de inflamación están bajando gradualmente”.
Añadió que por ahora Fico seguirá hospitalizado.
El domingo, la clínica dijo que Fico, de 59 años, ya no corría peligro de muerte, luego que el miércoles pasado fue baleado en el abdomen cuando saludaba a partidarios frente a un centro cultural en el pueblo de Handlova, a unos 140 kilómetros al noreste de la capital, Bratislava.
Un video muestra al primer ministro saludando a gente reunida detrás de unas barreras, extendiendo el brazo para darles la mano, cuando un hombre da un paso al frente, extiende el brazo y dispara cinco veces antes de ser reducido y arrestado.
El viernes, Fico inmediatamente fue sometido a cinco horas de cirugía para tratar las heridas que sufrió, seguidas a otras dos horas de cirugía para extirpar tejidos necrotizados derivados de sus heridas.
El tribunal penal especial del pueblo de Pezinok ordenó el sábado mantener tras las rejas al sospechoso, quien ha sido acusado de intento de asesinato. La fiscalía dijo temer que podría darse a la fuga o perpetrar otros crímenes si es puesto en libertad, dijo un vocero del tribunal. El sospechoso puede apelar la decisión.
Se ha difundido muy poca información sobre el perpetrador, luego que la fiscalía ordenó a la policía no identificarlo públicamente ni publicar detalles del caso.
Los funcionarios del gobierno inicialmente dijeron que se trató de un ataque con fines políticos perpetrado por un “lobo solitario”, pero el domingo anunciaron que es posible que un “tercer actor” posiblemente estuvo involucrado en “actuar para beneficio del perpetrador”.
El gobierno de Fico ha realizado gestiones para reformar el sistema de canales públicos de comunicación y la oposición denuncia que el ello le daría a las autoridades control total de la radio y televisión. Ello, además de sus planes para enmendar el código penal para eliminar el cargo de fiscal anticorrupción, han suscitado temores de que Fico tenía planes de llevar a Eslovaquia por una senda más autocrática.
El socio de la coalición gobernante más pequeño, el ultranacionalista Partido Nacional Eslovaco, iba a reunirse con el gobierno esta semana para discutir la nueva ley de prensa que el parlamento empezó a debatir la semana pasada.
Por otra parte, la reunión del líderes de partidos parlamentarios convocada para el martes para calmar los ánimos tras el intento de asesinato de Fico, va a retrasarse en medio del escepticismo mostrado por varios partidos, entre ellos miembros del Gobierno.
“Los últimos días y conferencias de prensa nos han demostrado que algunos políticos son simplemente incapaces de una autorreflexión básica, incluso después de una tragedia así”, señaló el domingo en Facebook el presidente electo, Robert Pellegrini, que junto a la aún jefa del Estado, Zuzana Čaputová, convocó el encuentro.
El encuentro de líderes se convocó con la intención de “serenar la situación y rechazar la violencia”, según dijo Čaputová tras el ataque en el que Fico recibió cuatro disparos que le han dejado muy grave, aunque desde este domingo su vida ya no corre peligro.
Pellegrini, cuyo partido Hlas forma parte del Ejecutivo de nacionalistas de izquierdas y ultraderechistas, señaló que “al parecer aún no ha llegado el momento” de ese encuentro.
Pellegrini constató que “el escenario político no está preparado para la reconciliación mutua”, y dijo que se ha vuelto a enrarecer el clima político, algo que se refleja en las redes sociales, donde ha habido muchas amenazas a políticos, del Gobierno y de la oposición, y periodistas tras el atentado.
(Con información de AP)