Desde las 0 horas de mañana, jueves, se desarrollará en todo el país un paro general, el segundo desde que Javier Milei es Presidente, convocado por la CGT y ambas CTA, que afectará, entre otros servicios, a la educación. Los principales gremios docentes, como Suteba o Ceterea, o los privados como Sadop, anunciaron en los últimos días que se plegarán a la medida de fuerza, por lo que no habrá clases en la mayoría de las escuelas.
Las consignas para sumarse el paro general son:
- Rechazo a la eliminación del Fondo de Incentivo Docente (FONID).
- Defensa de los fondos nacionales para el Instituto de Previsión Social (IPS).
- Defensa de todas las partidas para Educación.
- No al impuesto a las ganancias en el salario.
- Respeto de los derechos laborales de los trabajadores.
El paro general se sentirá más fuerte en las escuelas de gestión pública. Algunos establecimientos privados anunciaron que abrirán sus puertas y readecuarán las clases en virtud de la cantidad de maestra y profesores que se presenten.
Qué pasa con el resto de los servicios
Comercios: se plegó la Federación Argentina de Empleados de Comercio y Servicios (FAECyS) y algunos locales permanecerán cerrados durante la jornada. “Alineados a los reclamos y demandas del Movimiento Obrero, los trabajadores/as mercantiles hemos decidido parar en defensa de las fuentes de trabajo, de la industria nacional y en defensa del sistema previsional argentino”, manifestó el titular del sindicato, Armando Cavalieri.
Salud: el sindicato de Sanidad, que encabeza Héctor Daer en los hospitales privados, como también las organizaciones que trabajan en la salud pública, se adhirieron a la medida de fuerza. De este modo, solamente se mantendrá el servicio de emergencias, tal como suele ocurrir ante estas situaciones.
Colectivos, trenes y subtes: todos los servicios de transporte público se verán afectados por la medida de fuerza gremial. Así lo dieron a conocer los distintos sindicatos del rubro. Desde la Unión Tranviarios Automotor (UTA), el gremio liderado por Roberto Fernández, aseveraron su postura de adherir a la huelga. De este modo, los colectivos no funcionarán durante todo el día, es decir, desde las 0 horas del jueves hasta la medianoche.
“Informamos que como consecuencia de las medidas del Gobierno Nacional tomadas directamente en contra del pueblo trabajador, y abiertamente orientadas a vulnerar derechos individuales básicos, La Unión Tranviarios Automotor se suma al reclamo de toda la sociedad, y adhiere a la medida dispuesta por la CGT”, precisó su publicación.
Y añadieron: “Solicitamos a las autoridades que tienen en sus manos las decisiones que están afectando las vidas de la inmensa mayoría del Pueblo, que reflexionen y comprendan los alcances del mandato que se otorgó a los poderes Ejecutivo y Legislativo, y que, con base en ello y al cumplimiento de la Constitución Nacional, obren en consecuencia, en defensa de los intereses y el bienestar de todos los argentinos y argentinas”.
En tanto, la Asociación Gremial de Trabajadores De Subte y Premetro también adhirió al paro general. “Desde la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y Premetro (AGTSyP – Metrodelegadxs) adherimos al paro nacional convocado por la CTA de los Trabajadores, la CGT y la CTA Autónoma”, informaron de manera oficial.
Tampoco habrá servicio de trenes, dado que los principales sindicatos, como Unión Ferroviaria, confirmaron que se sumarán al paro. De igual manera lo hizo La Fraternidad, que expresó en un comunicado: “Nos encontramos nuevamente bajo el asedio de un gobierno indolente que planea entregar el país a sus socios del capital financiero, mediante una ley nefasta de carácter neocolonial que conduce a la Argentina a retroceder en términos de desarrollo y soberanía”.
Vuelos: distintos sindicatos y empresas asociados a la actividad aérea adherirán a las medidas de fuerza, por lo que las empresas aéreas están teniendo que reprogramar vuelos. Según pudo saber Infobae, el hecho de que Intercargo —empresa clave para los servicios en tierra que necesitan las aeronaves— adhiera al paro implicará que las aerolíneas no puedan operar a excepción de aquellas que tienen personal de rampa propio. Es el caso de apenas dos empresas aéreas, American Airlines y Flybondi, y en el caso de Buenos Aires sólo pueden hacerlo desde el aeropuerto de Ezeiza.