En más de una ocasión, los dueños de perros se cruzaron con la problemática de que sus mascotas huyen o salen corriendo apenas tienen la oportunidad sin importar que estén de paseo o porque vieron que la puerta quedó abierta durante unos instantes.
Miembros del American Kennel Club (AKC), el club canino más grande de Estados Unidos, explicaron que es un comportamiento muy común y que podría representar un riesgo para las mascotas. Amy Pike, experta en comportamiento veterinario, ahondó en los motivos detrás de esta conducta.
La especialista indicó que existen algunas situaciones que suelen detonar este comportamiento y que los gatos son más propensos a mostrarlos que los perros, quienes dependen mayormente de los seres humanos para obtener alimento.
¿Por qué huyen los perros?
Pike señala que perseguir a otros perros o personas que llaman su atención, no saber esperar en la puerta mientras sus dueños salen, aburrimiento, la falta de enriquecimiento y la búsqueda de estimulaciones en el exterior, así como el nerviosismo, la ansiedad y el miedo son factores que detonan esta conducta.
“Los perros jóvenes definitivamente van a ser más propensos a esto porque probablemente aún no se les haya enseñado a esperar en la puerta”, comentó la especialista en comportamiento veterinario.
Aunque no es una conducta exclusiva de los jóvenes, pues existen mascotas más viejas que también pueden escaparse, especialmente aquellas que sufren de demencia o pérdidas auditivas que, según Pike, pudieran hacerles estar confundidas o incapaces de escuchar una orden verbal para quedarse.
También existen situaciones que agregan una capa de dificultad a la orden de permanecer dentro de casa o de no salir corriendo como mudarse a una nueva casa.
“El entrenamiento previo puede no ser generalizable, es decir, si el perro sabía que debía quedarse y esperar cuando se abría la puerta en una casa anterior, es posible que no comprenda que se supone que debe hacer lo mismo en su nuevo hogar”, indicó Pike.
Como son animales extremadamente inteligentes y capaces de memorizar las rutinas de sus dueños, puede que aprendan a asociar sonidos o acciones con oportunidades para salir corriendo.
“Los perros encadenan acciones: cuando suena el timbre, el dueño abre la puerta. Por lo tanto, es una oportunidad para escapar”, explicó la especialista en comportamiento animal .
Es así, como el timbre de una puerta puede convertirse en un detonante para las mascotas y sus ganas de escapar, salir corriendo o satisfacer sus necesidades energéticas.
También existen situaciones u otros animales como las ardillas que se pueden convertir en detonante. Estos roedores servirán como un estímulo para las mascotas aburridas que tratan de encontrar con qué entretenerse.
Mientras que el miedo, lejos de ser un motivante positivo, los hará correr despavoridos en un intento de encontrar refugio.
“Cuando los perros salen corriendo, especialmente si es a causa de un ruido, están intentando alejarse lo más posible y no necesariamente pensando racionalmente en volver a casa”, detalló Pike.
¿Cómo evitar que mi perro escape?
Existen estrategias para evitar que un perro salga corriendo, la principal es obtener ayuda médica, pues, de acuerdo con la especialista en comportamiento, las fobias a los ruidos “pueden ser en realidad un signo de malestar en alguna parte del cuerpo de la mascota” como artritis o dolor gastrointestinal.
“Si se sabe que el perro sale corriendo de la puerta, será fundamental controlarlo hasta que se le enseñe el comportamiento alternativo. Puedes colocar a tu perro en una habitación cerrada, como el baño del pasillo o una oficina, cuando abras la puerta”, explicó Pike.