El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, ha celebrado este miércoles de madrugada la inauguración del Instituto Cervantes de Shanghái, que se une al de Pekín para convertir al país en la única nación europea en tener dos centros culturales reconocidos por el Estado chino.
“Para mí es un orgullo que hoy esta biblioteca se transforme en el segundo centro que abrimos del Instituto Cervantes en China. España se convierte así, y no es menor, en el único país europeo con dos centros culturales reconocidos por el Estado”, ha manifestado Sánchez durante su intervención.
Antes de convertirse en un Instituto Cervantes, este centro era una biblioteca inaugurada en 2007 y que contenía más de 12.000 libros en español y en las tres lenguas cooficiales del país.
En ese sentido, el mandatario ha afirmado que esta apertura “ejemplifica” la amistad y la cooperación de China y España, cuyas relaciones se han visto enriquecidas a través de muchos “intercambios culturales” protagonizados por figuras como la del madrileño Diego de Pantoja, autor de ‘El mundo fuera de China’ –tratado del siglo XVII escrito en chino mandarín que pretendía para dar a conocer la cultura occidental en la China de entonces– y otras más actuales, como el director del Instituto Cervantes, Luis García Montero, entre muchos otros.
Sánchez ha destacado también que el chino mandarín y el español son “las dos lenguas con mayor número de hablantes nativos en el mundo”, razón por la que considera que el interés mutuo en ambos idiomas “abre un puente sobre el pacífico entre China y el Caribe”.
En ese sentido, ha recordado que en China hay más de 60.000 estudiantes de español y que los estudiantes de bachillerato pueden examinarse de español en vez de en inglés en las pruebas de acceso a la universidad.
EL INTERÉS POR EL MANDARÍN EN ESPAÑA
De igual forma ha destacado el interés que existe en España por el mandarín, y es que en torno a 60.000 personas se encuentran estudiando esta lengua, muchas de ellas a través del Instituto Confucio.
“Hace dos años, en 2022, se cumplió un siglo de la primera edición china de Don Quijote de la Mancha. Y permítanme invocar hoy la memoria de nuestra obra literaria más universal. (…) En ese extraordinario libro encontramos una sorprendente referencia al acto que hoy nos reúne. Se encuentra en el prólogo de la segunda parte del Quijote, allá por 1615. En ella, el autor fantasea o sueña, quizá, con la petición que le habría hecho llegar el gran emperador de China, que en este gran país se fundase un colegio para estudiar la lengua castellana y que en él se leyera el Don Quijote de la Mancha”, ha afirmado.
En base a ello, ha expresado que este acto de inauguración es parte del “encargo” de Cervantes, y que se trata de un gran “homenaje” a una obra sobre “aquel caballero andante empeñado en recorrer el mundo para deshacer agravios y enderezar entuertos”.