Madrid, 3 oct (EFE).- La ministra de Sanidad, Mónica García, ha exigido este jueves un nuevo modelo de residencias de personas mayores que permita crear centros “más cercanos, humanos, comunitarios, avanzados e integrales”.
García ha clausurado la jornada ‘El Derecho a la Salud de las personas mayores en residencias’, donde ha señalado que “es crucial centrarse en las personas y no solamente en los servicios”, así como fijarse más en las necesidades los usuarios y “no solamente en las necesidad de las instituciones”.
“El mayor riesgo que tenemos ahora mismo es la inacción”, ha subrayado la ministra, que ha pedido “colaboración entre las políticas sociales y las sanitarias”.
La titular de Sanidad ha recordado que “los mayores no son otros”, porque, en sus palabras, “mayores seremos todos”.
“El envejecimiento poblacional y el aumento de la longevidad es una realidad a la que tenemos que hacer frente, y más allá de dar años a la vida hay que dar calidad de vida a los años”, ha expresado.
En esta línea, García ha resaltado la importancia de que los mayores “lleguen en las mejores condiciones físicas, en las mejores condiciones de vida, y que seamos, y sean, capaces de disfrutar de la vida”.
La ministra también ha criticado la “suposición de que a cierta edad o con cierto grado de dependencia los mayores son una carga para el Sistema Nacional de Salud”.
“La carga somos todos y todas, esto tiene que ver con la visión ideológica de que una persona cuando deja de se productiva es una carga”, ha reivindicado la titular de Sanidad, quien ha tildado esta creencia de “visión deshumanizadora” que se debe “combatir día a día”.
Por otro lado, García ha esgrimido la importancia de no perder “el enfoque de la equidad y de la igualdad cuando estamos hablando de cuidados y salud”, así como de “tener el enfoque de la comunidad” para hablar de salud individual.
“En este mundo individualista, ¿la salud es un problema del que nos hacemos cargo entre todos o es un problema del sálvese quien pueda o quien tenga?”, se ha preguntado.
Por último, la ministra ha advertido de que “la edad puede ser un factor de discriminación dentro de los cuidados y el sistema sanitario”, ante lo que se ha comprometido a “seguir trabajando” para impedirlo.
“Queremos un sistema más justo, equitativo y humano, necesitamos de todas las manos, ideas y neuronas para que así sea”, ha sentenciado. EFE