A través del Decreto 0755 del 18 de junio de 2024, el Gobierno nacional oficializó el nombramiento de Sebastián Camilo Guanumen Parra como nuevo embajador de los colombianos ante Chile.
Guanumen ofició como cónsul, cargo que ahora ostenta María Antonia Pardo. La hoja de vida del ahora embajador había sido publicada por Presidencia de la República el pasado 20 de marzo.
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Las razones por las que Guanumen no se había podido posesionar
Desde que se supo del nombramiento de Sebastián Guanumen como embajador de Colombia en Chile se desataron una serie de cuestionamientos por su participación en la campaña del presidente Gustavo Petro. Guanumen fue responsable de estrategias tildadas de “non sanctas” en favor de la aspiración del mandatario. Entre otras cosas, el joven había dicho que era necesario “correr la línea ética” en favor del entonces candidato presidencial, perjudicando la imagen de Federico Gutiérrez, hoy alcalde de Medellín, quien en 2022 aspiraba a la presidencia.
“Nosotros necesitamos empezar a atacar a Fico (Federico Gutiérrez), y eso va con los comentarios para memes, entonces sacamos el meme y demás. Pero necesitamos empezar a infundir ciertos rumores y ciertos elementos que nos sirvan a nosotros en contra de Fico, así como nos lo están haciendo a nosotros en esta campaña”, dijo en su momento durante una reunión virtual.
A pesar de haber sido designado como embajador el 20 de marzo de 2024, luego de oficiar como cónsul en Santiago de Chile, el decreto para oficializar su nombramiento no se había firmado. Este hecho levantó dudas sobre su estatus diplomático en este país y su vínculo laboral con el Ministerio de Relaciones Exteriores.
La razón de la demora nunca quedó del todo clara. Inicialmente, se barajaron varias hipótesis, desde temas de género, debido a algunas denuncias en su contra, hasta posibles inconsistencias en su hoja de vida y cuestionamientos por investigaciones en su contra. Al respecto, han quedado al descubierto una serie de interrogantes tanto en suelo colombiano como en territorio chileno.
Pese a estos problemas, expuso en su momento la revista Semana, Guanumen continuó actuando como embajador oficial, asumiendo atribuciones dentro de la embajada. Este hecho podría representar un problema legal para él y la Cancillería, ya que, según el mencionado medio, si Guanumen seguía recibiendo los beneficios de ser diplomático, podría configurarse un posible peculado ante otros profesionales de carrera.
Este traspié jurídico generó más controversia, especialmente porque reemplazó en el cargo a Gloria Esperanza Acevedo, quien había sido nombrada cónsul general de manera provisional en agosto de 2023.
Acevedo, según se ha sabido, también ha enfrentado críticas en Chile por el uso de un esquema de seguridad y otros beneficios que no cualquier diplomático tiene.
En un momento clave para la designación de Guanumen, en marzo del año en curso, la senadora María Fernanda Cabal no dejó pasar la noticia, y develó los millonarios sueldos que ha recibido Guanumen mientras fungía como cónsul de Colombia en Chile.
“Sebastián Guanumen, cónsul de Petro en Chile y propuesto embajador ante ese país, con el mérito de correr la ‘línea ética’, entre 2023 y 2024 logró salarios por USD 129,677.39, lo que equivale a $505,741,821 pesos”, develó la congresista por el Centro Democrático.
De momento, Guanumen no se ha pronunciado sobre la confirmación del nombramiento. Como cónsul, había presentado sus objetivos, entre los que se contaban el fortalecimiento de los lazos entre Colombia y Chile, sin dejar de lado el mejoramiento del funcionamiento institucional en el cuerpo diplomático. La única plataforma oficial de Guanumen es Instagram, red social a través de la cual ha compartido algunas de sus experiencias en el país austral.
