Cuando Andrés Manuel López Obrador asumió como presidente prometió que en su administración el sistema de salud sería como en los países de primer mundo. Ordenó la eliminación del Seguro Popular, programa creado por Vicente Fox para atender a las personas sin seguridad social y en su lugar instauró el fallido Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), que prometía acceso universal a servicios de salud y medicamentos asociados de manera gratuita. Sin embargo, esto tampoco fue lo que se esperaba y en su lugar nació el IMSS-Bienestar.
En 2023 se decidió que los servicios de salud pasarían a este programa bajo la promesa de gratuidad y universalidad que, según el presidente, no se habían logrado con los dos anteriores. El IMSS-Bienestar es un organismo descentralizado que ofrece salud a la población que no cuenta con seguridad social, pero sin negar atención a los que tengan algún esquema de afiliación; éste tiene la intención de centralizar y consolidar los servicios de salud en los estados que optaron por federalizar sus servicios de salud.
Hasta ahora, son 23 estados los que han decidido dejar sus servicios de salud en manos de la Federación: Baja California, Baja California Sur, Campeche, Chiapas, Ciudad de México, Colima, Guerrero, Hidalgo, Estado de México, Michoacán, Morelos, Nayarit, Oaxaca, Puebla, Quintana Roo, San Luis Potosí, Sinaloa, Sonora, Tabasco, Tamaulipas, Tlaxcala, Veracruz y Zacatecas, todos gobernados por el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) o alguno de sus aliados, los partidos Verde Ecologista de México (PVEM) o el del Trabajo (PT).
El resto de las entidades que han decidido hacerse cargo de su programa de salud y no depender del gobierno central, son los nueve aún gobernados por la oposición: Aguascalientes, Chihuahua, Coahuila, Durango, Guanajuato, Jalisco, Nuevo León, Querétaro y Yucatán, aunque se prevé que éste último se sume a la federalización de la salud después del 30 de septiembre, cuando el morenista Joaquín ‘Huacho’ Díaz Mena asuma como gobernador.
La inconformidad de los trabajadores de salud y la ‘reforma laboral’ que viene
El presidente López Obrador dijo, ya iniciado el ocaso de su sexenio, que se va dejando un sistema de salud no igual, sino mejor que el de Dinamarca. “Ya es una realidad que en 23 estados se encuentra el sistema de salud universal y gratuito para personas sin seguridad social conocido como IMSS-Bienestar, ya es el más eficaz en el mundo”, presumió en su sexto y último informe de gobierno el pasado 1 de septiembre.
Sin embargo, del dicho al hecho hay un gran trecho, reza el popular refrán. Los trabajadores de la salud, los de primera línea, no respaldan las declaraciones de AMLO. Todos los días viven la falta de insumos, desde material de curación hasta medicamentos que son fundamentales para la atención de los pacientes. Carecen de equipo médico y el que tienen, no ha recibido mantenimiento en mucho tiempo, lo que evidentemente merma la calidad del servicio que en ocasiones es severamente criticado por los pacientes y sus familiares.
Sin embargo, el histórico problema del desabasto de medicamentos, material de curación, infraestructura, equipo médico y hasta de personal no es el único problema de la incorporación al IMSS-Bienestar, pues el sector salud de los estados que ya se sumaron (médicos, enfermeros, paramédicos y administrativos) advierte que las condiciones de trabajo de este esquema significan un riesgo para su estabilidad laboral.
Fabián Infante, enfermero y médico en el Estado de México, dio a conocer que varios trabajadores de la salud se han amparado en contra de los efectos de la creación del IMSS-Bienestar, pues el decreto -sin decirlo- responde a lo que pareciera ser una reforma laboral, sin embargo, desde hace nueve meses no ha habido respuesta a su recurso, y menos ahora considerando el paro nacional en que se encuentra el Poder Judicial de la Federación (PJF).
Alistan una jornada de protestas para dar a conocer sus demandas
Fabián Infante mencionó que entre sus exigencias se encuentran:
- Mantenimiento a instalaciones y equipo biomédico, así como el abasto suficiente de material y medicamentos
- Abrogación de las condiciones generales de trabajo del OPD (organismo público descentralizado) IMSS-Bienestar, ya que el tabulador de IMSS-Bienestar no reconoce la profesionalización de los trabajadores y propone salarios más bajos que la Secretaría de Salud Federal
- Profesionalización universal por perfil y trayectoria académica
- Basificación universal al 100 por ciento de trabajadores del IMSS, ISSSTE, SSA e IMSS-Bienestar, ya que a estas alturas, muchos trabajadores continúan firmando contratos temporales
- Reestructurar el sistema de pensiones, ya que la nueva reforma al sistema de pensiones no beneficia al sector salud
- Asignar el 8 por ciento del PIB para salud, ya que actualmente no llega ni al 3 por ciento
- Firma y ratificación del Convenio 149 y la Recomendación 157 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) para enfermería
“Estamos demostrando que se vulneran nuestros derechos laborales y que la reforma en el sector salud es una reforma laboral en contra de ellos. El PJF se ha tardado en extremo en resolvernos, por esa razón hemos decidido convocar a una marcha nacional”, explicó el servidor, aunque en realidad se trata de una amplia jornada de protestas y difusión:
- 9 de septiembre: Conferencia de prensa en las oficinas centrales del IMSS-Bienestar en la Ciudad de México (Gustavo E. Campa 54, colonia Guadalupe Inn, alcaldía Álvaro Obregón), para dar a conocer sus demandas
- 10 de septiembre: Realización del Foro Nacional: La Reforma Laboral del OPD IMSS-Bienestar, en el Club de periodistas de la México (Filomeno Mata 8, Centro Histórico, alcaldía Cuauhtémoc) a las 10:00 horas
- 13 de septiembre: Marcha de trabajadores de la salud de todos los estados, desde las oficinas centrales del IMSS (Paseo de la Reforma 476, colonia Juárez, alcaldía Cuauhtémoc) hacia el Ángel de la Independencia, a las 15:00 horas. De manera paralela, alistan protestas en estados como Hidalgo, Veracruz, Quintana Roo, Oaxaca y Baja California, todos incorporados ya al IMSS-Bienestar