UGT ha celebrado este viernes un acto de homenaje a la sindicalista Aurora Picornell en Palma tras el comportamiento del presidente del Parlament, Gabriel Le Senne, al que ha calificado de “energúmeno”.
Así se ha expresado el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, quien ha reivindicado la figura de la represaliada porque “sin justicia y reparación no se puede avanzar, ni puede haber reconciliación”.
Álvarez ha aseverado que la ultraderecha “no cree en la democracia” y ha criticado que responsabilizara del crimen de Mocejón a los migrantes que residían en el municipio, puesto que “desmentido tiene menos recorrido” que las acusaciones.
Asimismo, el dirigente sindical ha reprochado a los partidos presentes en el Congreso de los Diputados que no hayan aprobado la redistribución de los menores migrantes en el territorio español, porque “5.000 personas en España son una gota de agua en un océano”.
Del mismo modo, ha puntualizado que estas posiciones de “ultraderecha no solo están en un partido” y ha pedido “erradicar legalmente” la culpabilización de los migrantes.
El sindicalista ha asegurado que los emigrantes han traído “progreso” a España y, en algún momento, “todas las personas han sido emigrantes”, por lo que ha pedido una mayor empatía. “Son personas que buscan un nuevo futuro, una nueva vida y que contribuyen a construir una sociedad más justa y mejor”, ha añadido.
Igualmente, ha pedido una reflexión sobre la situación y la coyuntura política que se vive en el mundo, puesto que, desde su punto de vista, el “fascismo está llamando a las puertas de Europa y América”.
Por estos motivos, ha reivindicado el papel “importante” que puede jugar el sindicalismo y ha pedido “poner en valor” referentes como el de Picornell.